31 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 31 de julio de 2009


María José llega a casa después de su última jornada laboral y empiezan oficialmente nuestras vacaciones (sé que llevo un mes sin dar golpe... pero hoy empezaban nuestras vacaciones y los cambios en mi situación laboral no harán que un hecho tan importante sufra modificaciones). Las inauguramos con un aperitivo improvisado en el patio de Graceland, con los tradicionales regalos de vacaciones (un disco para María José, una camiseta chulísima para mí y un cerdito de goma – que hace piiiip cuando lo aprieta, por suerte durara poco entre sus dientes – para Cass) y con una comida en la que empezamos a tener la sensación de que algo ha cambiado.
Café con helado en el Café de la Plaça, siesta, Paolo Conte cantando mientras escribo esto y leo las crónicas que Jordi P. escribe de su viaje... mañana empiezo mis propias crónicas vacacionales que no serán ni tan exóticas ni tan llenas de acontecimientos dignos de mención... pero seguro que serán relajadas.
Mientras eso llega, todo hoy parece mejor, incluso la última de las infiltraciones que me han estado castigando durante las últimas semanas parece más agradable. Siempre he querido jugar infiltrado y este verano por fin lo podré hacer.

30 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Jueves, 30 de julio de 2009


Hemos dormido mal... el calor, las uñas de Cass – que tampoco puede dormir – resonando en las escaleras de madera que suben a nuestra habitación, los movimientos de la pareja que tampoco consigue conciliar el sueño... nada que un reparador desayuno no pueda arreglar. Mientras desayunamos escuchamos el “Matí de Catalunya Ràdio” que, con Pere Mas al frente, nos ha ganado de nuevo para la causa después de una temporada para olvidar.
María José se va a trabajar y yo me quedo en casa (comprando para el desayuno, leyendo un poco, digitalizando – andamos por la P de Pixies, Pavement, Pizzicato Five o Parkinson D.C. entre otros... ahora estoy digitalizando a los franceses Pow Wow-, leyendo los blogs de amigos, conocidos, saludados y leídos y perdiendo el tiempo delante del ordenador).
Me armo con mi mp3 – mejor alimentado que nunca (Pavement, Cass Mc Combs, Darren Haynan, la banda sonora de I am Sam, Paolo Conte, Sonic Youth, The Silos, Vinodelfin, Xavier Baró, Vetusta Morla, Anni B. Sweet, Eels, Tabletom y un par de recopilatorios de Rockdelux con lo mejor del 2008) y bajo al centro de Barcelona para comprar un regalo para una amiga y para caminar mucho... por el centro, por el Gótic, por el Raval, por Poble Sec.... cuando estoy al borde del colapso paro en un bar para hacer una cerveza. Elijo una terraza del Paralel donde corre el aire. El bar está regentado por un matrimonio de origen oriental (diría que son chinos pero sería jugar a las adivinanzas étnicas... como cuando jugábamos con la entrañable baraja de las razas de Fournier... mis favoritos siempre fueron la familia esquimal). Son amables, atentos, me sirven la cerveza en una copa helada y la acompañan con una tapa de cacahuetes. Lo siento por los malhumorados propietarios de bares con terraza.... pero ellos son el futuro ( y de momento, un futuro mejor).

Vuelta a casa en Bicing. El martes estuve cocinando y María José preparó gazpacho. Esta preparación previa me permite elaborar un menú de pequeños platillos de tapas selectas: gazpacho con taquitos de edam, cuscus con pollo asado, falafel, pasta con verduras y atún a la plancha (que no resulta espectacular porque la pieza cocinada no es demasiado buena). Cuando llega María José comemos en el patio de Graceland y se está tan bien que alargamos con café, copa (un par de güisquis añejos) y puro (los restos de la boda de Roger y Clara). Un placer que nos da sensación de vacaciones.

María José se va a dormir un poco (después de la larga e improductiva noche es lo menos que se puede hacer) y yo me estiro en la hamaca para acabar el libro que estaba leyendo y el Cultura’s de esta semana.

LA DAMA DE LA FURGONETA
Alan Bennett

analn bennett, la dama de la furgoneta
Antes de empezar a elogiar este pequeño libro quiero lanzar un aviso. “La dama de la fugoneta” es un libro muy breve... se lee en horas (pocas) y me parece una exageración publicarlo como libro (publicado por Anagrama debe tener un precio considerable... que no he pagado gracias a la biblioteca municipal).
Una vez leído y valoradas las consecuencias que ha provocado (sonrisa perenne en la cara y más de una carcajada) lo considero una inversión – si alguien quiere hacerla – positiva.
“La dama de la furgoneta” narra, con el humor habitual de Alan Bennet, la relación del autor con Miss Shepherd y su furgoneta. En 1974 Miss Shephard instaló su furgoneta en el escaso jardín de Alan Bennet. La convivencia de los tres – autor, Miss Shepherd y furgoneta – durante más de 20 años es el leit-motiv de este pequeño relato. Miss Shepherd es el ejemplo perfecto de la excentricidad británica y su anfitrión también hace gala de esa “flema” que se ha convertido en parte del prototipo inglés. El resultado es una narración divertida, entrañable y muy agradable de leer. El lector español – o al menos el lector español inculto como es mi caso – se pierde comparaciones y referencias culturales e históricas... pero no importa, el relato resulta tan delicioso y tan brillante que se lee en un suspiro.
Entrañable y recomendable.

29 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 29 de julio de 2009


Como cada año, cuando se acercan las vacaciones, toca preparar la lectura para estos días de asueto. Para la playa, para la hora de la siesta, para cuando no hay nada mejor que hacer, para compartir con María José...
Y este año he decidido no contribuir al enriquecimiento de los propietarios del establecimiento donde solía adquirir los libros veraniegos y pasarme por la biblioteca del barrio. El resultado es prácticamente el mismo y el ahorro considerable.
los libros del verano ya están preparados
Este año me acompañarán a S’Agaro: “La Mennulara” de Simonetta Agnello Hornby, “La dama de la furgoneta” de Alan Bennett, “El interior del bosque” de Eugenio Fuentes, “Vida y destino” de Vasili Grossman y las obras completas de Edgar Allan Poe y H.P. Lovecraft (que tengo un poco abandonadas desde hace un mes). Espero tener tiempo para todos ellos.

El domingo pasado fuimos al cine. Por la mañana, como en los viejos tiempos. Vimos “Harry Potter y el misterio del príncipe”. Sin ser la mejor entrega de la serie – yo me quedo con la tercera dirigida por Cuadrón – mantiene el nivel y contribuye a que la saga envejezca como un clásico. Espero con ganas la llegada del último capítulo. Pero lo que más me gustó no fue la película sino recuperar esa sensación – placentera por conocida – de ir a los cines Icaria en sesión matinal acompañado de María José.

LA HIJA DEL SEPULTURERO
Joyce Carol Oates


joyce carol oates, la hija del sepulturero

Hace casi 6 años, era verano, descubrí a Joyce Carol Oates de la mano de “¿Qué fue de los Mulvaney” y desde entonces he ido buceando en su extensa producción literaria – extensísima (dicen las malas lenguas que escribe una novela en menos tiempo que lo que tarda un lector en leerla) - asombrándome siempre por la calidad de sus libros.
Y “La hija del sepulturero” no es una excepción. Joyce Carol Oates es una gran narradora, domina los tiempos, los ritmos y el lenguaje. Tanto da el tema, leerla es siempre el placer. Lo que en otras manos sería un culebrón se convierte en las suyas en una gran novela, en un clásico contemporáneo. La hija del sepulturero puede parecer una novela del XIX. Su estructura, la manera en la que afronta el tema de identidad, ese cuidado con el trazado de los personajes... pero esa apariencia esconde una novela totalmente moderna ya que Oates domina el ritmo, sabe cuando acelerar, cuando parar, cuando volver hacia atrás y saltar de nuevo hacia adelante añadiendo nueva información.
Al igual que Richard Ford, en cada una de sus novelas, Oates nos ayuda a reconstruir la América del siglo XX. Una gozada.

28 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 28 de julio de 2009


El tiempo es un bien preciado. Los que me leéis con regularidad (gracias por vuestra paciencia) habéis aguantado numerosos lloriqueos a causa de su ausencia. Y ahora que lo tengo todo - como cada vez que lo he tenido - intento dilapidarlo en monumentales e inútiles tareas que no llevan a ningún sitio.

Dentro de estas faraónicas tareas que han deglutido gran parte de mi tiempo libre durante los últimos años, destaca con luz propia la monumental catalogación y etiquetaje de mis discos (María José sufrió también jornadas de trabajo maratonianas que han servido para muy poco). Aparte de esta, hay otras muchas pequeñas – e inútiles – tareas de clasificación que he ido acometiendo y, poco después, abandonando a lo largo de mi vida.

La que ahora me ocupa es una de las peores. Una vez catalogada, la música necesita una digitalización (al final, el reproductor de mp3 es el aparato que más utilizamos para escuchar música, incluso en casa). Y me he puesto a ello.

Como la digitalización de todo mi archivo sonoro sería prácticamente imposible, he decidido empezar por lo fácil. De momento CD’s y seleccionados, pero no descarto emprender también algún día la tarea con los vinilos y – por que no – con algunas cintas de K7. Ahora mismo, mientras escribo esto, el ordenador no para (es en momentos así cuando desearía tener un ordenador más rápido).

Sé que la tarea es tan agotadora como inútil (en la época de Spotify parece tonto digitalizarse uno mismo sus discos) pero siempre seré un romántico y me gusta escuchar MIS discos.

Seguramente la tarea quedará inacabada y perderé mucho tiempo sin entender donde ha ido (en parte escribo esto para recordármelo). Pero por el camino me lo estoy pasando bien y vuelvo a escuchar esos discos que habían quedado olvidados en la estantería.
Ahora mismo, mientras escribo esto y digitalizo el “Just when you’re thinkin’ things over” de The Charlatans, suena la banda sonora de “I am Sam” que digitalicé ayer.

27 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 27 de julio de 2009


Desde que hace años, una cena en casa de Olivia y Roberto, marcó el principio de las vacaciones (o al menos de la sensación de vacaciones), hemos repetido.
De nuevo llegamos a su jardín al anochecer y, mientras Roberto acaba de preparar la comida, empezamos a disfrutar de la noche con una cervecita en las manos.
Comida sensacional (Roberto a los fogones es toda una garantía), buena conversación, hilo musical (proporcionado por los vecinos) extraño (llegando a lo bizarro cuando la música se convierte en gritos guturales) y ganas de seguir hasta tarde.

Olivia le ha regalado una mesita de noche a María José. Es un mueble antiguo que huele a iglesia (creemos que es por el tipo de madera). La cargamos en el carro que hemos traído para ello y Roberto insiste en acompañarnos hasta el coche. El primer desnivel del terreno tiene consecuencias catastróficas y la mesita acaba en el suelo (por suerte sin más consecuencias). Intento que María José y Roberto me ayuden a cargarla de nuevo en el carro pero su contagioso ataque de risa impide todo tipo de actividad física e intelectual. Volvemos a casa contentos después de reír como hacía tiempo que no lo hacíamos.

Pese a que mi actual estado paro-vacacional ha reducido mi relación con la prensa escrita (el flojo aspecto que presenta de momento El País de verano influye en ello) sigo encontrando esquelas que llaman la atención. La de hoy es la de Lluís Serra Pablo, una persona pública (“Llullu” es el protagonista de “Quiet” el libro que su padre Màrius Serra escribió sobre él). La esquela, tierna y emocionante, dice así:

“ha mort quietament al barri d’Horta, a l’edat de 9 anys, el divendres 24 de juliol de 2009, havent dinat” (...) “Qui no recorda, no oblida. Qui no oblida, recorda. Estimo, però no ho recordo. M’estimen, i no ho oblido. Mai no cauré en l’oblit”

(ha muerto quietamente en el barrio de Horta a la edad de 9 años el viernes 24 de julio de 2009, habiendo comido (...) Quien no recuerda, no olvida. Quien no olvida, recuerda. Quiero pero no lo recuerdo. Me quieren y no lo olvido. Nunca caeré en el olvido.)

Un abrazo para todos aquellos que sufren su pérdida.

24 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 24 de julio de 2009


De nuevo es viernes y ha pasado una semana sin que me de cuenta. Debe ser el calor, o la falta de una agenda laboral que comprima mi tiempo. O todo junto, o nada de esto. La verdad es que me ha dado pereza ponerme a escribir. Y como siempre que me pasa esto, me veo obligado a hacer una crónica de urgencia de estos últimos días.

La semana ha estado llena de pequeñas cosas buenas en las que emplear mi tiempo (las pongo en sentido inverso para intentar dar una falsa sensación de originalidad: Para dormir la etapa de hoy del Tour. Para instalar muchos programas en el ordenador de mi madre (superando problemas que parecían irresolubles y que realmente eran chorradas). Para tomar un café con Toni con la excusa de que necesito vitaminas para el nuevo ordenador de mi madre (siempre actuando como “dealer” con su habitual profesionalidad). Para cenar con Esther, Albert y Marta en La Troballa (Riera de Sant Miquel, 69. Barcelona. Teléfono: 93 217 34 52). Comimos muy bien (yo un wok de verduritas y un tartar de salmón) pero sobretodo – y como siempre – estuvimos muy bien (la próxima en S’Agaró). Para dar paseos con Cass y María José por el barrio derritiéndonos por el calor. Para re-desayunar (una tradición de los jueves que me empieza a gustar mucho) con David con la peregrina excusa de que necesitaba ayuda con su nuevo blog (no le ayudé mucho pero las pastas que trajo estaban buenísimas). Para ayudar a mi madre a comprar un nuevo ordenador (e instalarlo, y comer con ellos y llevarme una provisión de alimentos para comer el resto de la semana). Para leer (poco pero bueno, estoy leyendo “La hija del sepulturero” de Joyce Carol Oates). Para apuntarme al paro y pasar así a engrosar las abultadas y preocupantes listas. Para escuchar buena música (los nuevos de Dinosaur Jr. y Sonic Youth, algo de Lucinda Williams y viejos discos de Bonnie Prince Billy, Black Lips, Billie Holiday, Brian Wilson y Bright Eyes). Para ir al medico (llevo semanas jugando infiltrado). Para hacer un par de barbacoas (de pescado y de carne). Para ver etapas del Tour sin dormirlas (que grandes las victorias de Contador). Para hacer siestas en la hamaca y en el sofá. Para pasar calor y para pensar (menos de lo que sería deseable).

Hoy es viernes. Queda menos para las vacaciones (yo ahora estoy en el limbo... el cielo – las vacaciones – empieza el viernes que viene).

20 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 20 de julio de 2009


Después de mucho tiempo la hamaca cuelga en el patio de Graceland. Colgarla era fácil y hacerse con los ganchos todavía más. Pese a eso han pasado más de tres años desde que Olivia y Roberto me la regalaron. No tengo perdón.

la hamaca, Cass, yo no estoy, alguien tenía que hacer la foto
Acabamos de comer, mientras María José se pone al día con su correo electrónico en la mesa del patio yo me estiro en la hamaca. Hace calor pero – a ráfagas – llega un aire fresco que acaricia y hace sonreír deseando más. De los patios de las fincas vecinas llegan gritos de niños jugando. Huele a verano. Poco a poco caigo en la inconsciencia ayudado por el lento balanceo. Cass duerme también a mis pies.
No sé cuanto tiempo duermo, pero me despierto como nuevo. Será la primera de muchas... si consigo echar a María José que se ha hecho con ella ahora.

19 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 18 de julio de 2009


Los sábados de boda tienen un ritmo distinto. Intentamos desayunar con tranquilidad pero todavía tenemos un montón de cosas que hacer antes de que, a las 10:30 de la mañana, salgamos con destino a la masía que Clara y Roger han escogido para celebrar su enlace. Realmente se casaron ayer, pero hoy han decidido compartirlo con familia y amigos en una fiesta que han preparado con mucha ilusión.

Cuando Jordi P. llega a casa, salimos con destino a Perafita que es el pueblo en el que está La Tría. En el jardín de la casa – preparado para la ceremonia y la celebración – nos reunimos con amigos (Toni, Jordi M, Patricia...) y conocidos (muchos de ellos ex-compañeros de trabajo).

La ceremonia, ni religiosa ni civil, resulta muy emotiva (canciones hechas expresamente para los novios, parlamentos que hacen aparecer pañuelos de papel de todos los bolsos, sonrisas y lágrimas, un cuento escrito para la ocasión y mucho cariño puesto tanto por los que participan como por los que sólo escuchan) y acaba como todas: con una traca, abrazos y muchos besos.

Quim y Carol no se lo han querido perder y aparecen por sorpresa con Noa que tiene poco más de 15 días. Es el momento de celebrarlo con una comida informal que facilita que paseemos por el jardín y que se alarga hasta que empieza a oscurecer.

Un video en el que Roger y Clara nos muestran el cariño que nos tienen a todos y lo mucho que se han esforzado para que la fiesta la recordemos todos los que hemos tenido la suerte de asistir, pone punto final a la primera parte de la fiesta. Ahora continuará con baile en el jardín, copas hasta la madrugada y desayuno – los que lleguen con fuerzas – al día siguiente. A nosotros nos espera Cass en casa y un largo camino de retorno. Volvemos contentos por haber podido compartir este momento tan especial con ellos y por haberlo pasado tan bien.

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 17 de julio de 2009


Un día redondo podría ser parecido a este.

Desayuno con María José. Es muy pronto y, cuando ella se va a trabajar, me quedo en casa escribiendo un poco mientras escucho la radio. Me ducho, doy de comer a Cass y damos un corto paseo por el barrio.
Me voy al centro de la ciudad vecina. El libro que estoy leyendo – “La hija del sepulturero” de Joyce Carol Oates – es demasiado voluminoso para cargarlo hoy, lo dejo en casa y cojo el Cultura/s de La Vanguardia.
Jordi R. me lleva a re-desayunar en su bar habitual. Parroquianos, gente del barrio y buen ambiente. Me como un impresionante bocadillo de lomo con cebolla y pimientos del padrón – como dice Jordi “hecho con cariño” – y lo acompañamos con un poco de vino y un buen café.
Jordi se va a trabajar – una lástima no poder seguir discutiendo de música y de otros asuntos de semejante importancia – y yo aprovecho para hacer unas compras.
Primero me hago con el abono conjunto para el Primavera Club 2009 y el Primavera Sound 2010. El gasto (hecho a ciegas, sin conocer el cartel de los dos festivales y casi un año antes del PS 2010) es grande, pero el precio – 108 euros con 10 céntimos – me parece muy ajustado por la calidad que suelen tener los Primaveras. Esta oferta de doble abono la ofrecen durante un periodo limitado, a finales de mes empezará a incrementar el precio.
Después paseo por el Raval y cruzo las Ramblas para comprar los ganchos para sujetar la hamaca que – hace algo más de 3 años – me compraron Olivia y Roberto. A veces tener tiempo sirve para solucionar temas pendientes.
Nuevo paseo, esta vez de subida, y cervecita con cortezas en una terracita esquinera del Eixample mientras leo un poco.

Vuelta al barrio. Compro doradas y las aso en la barbacoa para que estén preparadas cuando María José vuelve a casa después de su última jornada laboral de la semana. Comemos – están buenísimas con un poco de aceite y pimienta – en el patio de Graceland. Hace calor pero hoy podemos disfrutar del exterior.

Siesta y tour. Dos conceptos que suelen ir unidos y que en ocasiones se mezclan.

Eonnagata, la foto es de Erick Labbe
En el TNC vemos “Eonnagata” de Sylvie Guillem, Robert Lepage y Russell Maliphant un espectáculo a medio camino entre la danza y el teatro. Eonnagata es un bello espectáculo que cuenta la historia del caballero de Eon, uno de los primeros espías de Luis XV. El caballero de Eon utilizó el travestismo para ocultar su identidad y la ambigüedad sexual es uno de los elementos centrales de la obra.
No es el mejor espectáculo de ninguno de los tres monstruos de la escena, seguro que cada uno en su campo ha dado frutos de más calidad, pero el resultado de la unión de los tres genios – empujados también por un acertadísimo vestuario de Alexander McQueen y un impresionante juego de luces diseñado por Michael Hulls – es un bonito y poético cuadro en el que la danza y el teatro se unen para contar una historia.
Toda una suerte poder haberlo vivido.

Volvemos a casa y cenamos, en el bar nuevo que han abierto en la plaza, un bocadillo en compañía de Mariona que mañana nos cuidará a Cass mientras nosotros nos vamos de boda. Hay que probarlo para poder opinar... pero nosotros volveremos al bar de siempre que ofrece más calidad y un servicio mucho más profesional y amable.

Hora de dormir. Estoy muy cansado. Hoy ha sido un buen día.

16 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 15 de julio de 2009


Hemos acabado de cenar y nos sentamos en el patio de Graceland con un libro en la mano. Leemos mientras el día se acaba y, poco a poco, la luz nos deja. Apuramos hasta el último minuto de luz. Cuando ya es imposible seguir leyendo, lo dejamos y salimos a dar un paseo con Cass.
A veces, los pequeños placeres son los que vale la pena vivir.

AMB ULLS DE NENA
Encarnació Martorell i Gil

Encarnació Martorell, amb ulls de nenaLa Guerra Civil Española, como todas las guerras, fue especialmente dura para la población civil. Hemos leído mucho sobre los padecimientos que sufrieron en la retaguardia por los bombardeos, el hambre y las enfermedades. Escuchando a nuestros mayores también nos hemos hecho una idea de la dureza de aquellos tiempos. Es por eso que “Amb ulls de nena” tiene un valor documental grandioso, ya que nos acerca como pocos libros históricos podrían hacer. Durante 70 años este diario, escrito por la – entonces - niña Encarnació Martorell, ha permanecido inédito.
Los ojos de niña a los que ser refiere el título del libro asisten – sin entender muchas veces – a las injusticias, a las carestías, al hambre y a la muerte que la guerra provocan.
Leerlo es recuperar historias como las que, por ejemplo, contaba Fernando Fernán Gómez en “Las bicicletas son para el verano” pero con el valor añadido de ser un testimonio vivo de la realidad.
La inocencia de Encarnació es uno de los valores del un dietario que, por su estructura, no está lejos de nuestros blogs. Los precios, las colas, los bombardeos, las cartillas de racionamiento, la partida de los hombres – cada vez más jóvenes o más mayores – hacia el frente, el dolor, el hambre, las esperanzas, el día a día de la retaguardia republicana durante la Guerra Civil... todo está en este pequeño gran libro. Fácil de leer y muy interesante.

14 julio 2009

“El dolce far niente, aquello de tumbarse a la bartola y pensar en as musarañas, ha pasado a la historia por el imperativo productivo del ocio. Un ejemplo, la oferta de turismo activo, cada vez más frecuente en los programas de las agencias de viajes o en Internet, se supone que para evitar la tentación de la tumbona y la mente en blanco. Pero ¿hay algo de malo en relajarse?”
La vida sin tiempos muertos. María Antonia Sánchez-Vallejo en El País. Sábado 11 de julio de 2009

“Cuando Fortuna hace girar su rueda hacia abajo, vete al cine y disfruta más de la vida.” Ignatius estaba a punto de decirse esto, cuando recordó que iba al cine cais todas las noches, girase como girase la rueda de la Fortuna.
John Kennedy Toole. La conjura de los necios


DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 14 de julio de 2009


Ya me ha pasado otra vez. El día 11 este blog cumplió 6 años y no me acordé, ni lo celebré como correspondía. El año que viene, lo prometo, no me olvidaré.
Durante estos seis años, y empujado por las rutinas que mis trabajos me han impuesto, he olvidado en ocasiones el nombre que le puse. Ahora – como Ignatius diría – la rueda de la Fortuna ha girado y el tiempo me pertenece. Y es ahora cuando recupero las jornadas que me hicieron disfrutar de cada minuto y me sorprende como puedo haberme olvidado tan fácilmente de lo precioso que puede ser cada minuto.

Hoy me he levantado pronto, todavía con sueño, después de haber dormido sin preocupaciones. He desayunado con María José mientras escuchábamos la radio y comentábamos las noticias y lo que el día nos tenía que traer.
Después, un largo paseo con Cass y, siguiendo los consejos de Ignatius, me he ido al cine. “Millenium” me ha gustado, es una buena adaptación pese a que no aporta nada a los que hemos leído el libro, quizás lo único que hacen es ponerles cara a los personajes (y aquí creo que aciertan bastante).
Al salir paseo cerca de la playa y me encuentro con María José en el Pato Pekín (c/ Marina, 16. Barcelona. Teléfono: 93 225 41 11). Comemos en una mesa con una vista sensacional del Puerto Olímpico mientras intentamos solucionar temas laborales de difícil arreglo.
Un nuevo paseo, corto porque hace mucho calor, nos ayuda a sentirnos mejor y a bajar la comida.

Con tanta actividad podría parecer que el día ha llegado a su fin. Pero no es así, aún queda tiempo para más paseos con Cass, para siestas, para un ratito de tele y para leer.
He acabado “Balas de Plata” de Élmer Mendoza, una novela negra ambientada en el México de los cárteles de la droga.

BALAS DE PLATA
Élmer Mendoza


Elmer Mendoza, Balas de PlataMéxico es un país que, cada vez más, está marcado por el dinero de los narcos y por la violencia que genera el narcotráfico. En este México actual, terrorífico y a la vez cotidiano, sitúa Élmer Mendoza la acción de Balas de Plata. Y todo lo que ocurre en la novela está marcado por esta herida que, poco a poco, desangra el país. Corrupción y violencia son cotidianas, quizás demasiado.
La ambientación de la novela es prodigiosa y el uso del lenguaje (rápido, directo, actual, vivo...) es tremendamente atractivo (me ha recordado a alguna de las mejores novelas de Vargas Llosa) y es uno de los principales atractivos de la novela. No es una novela fácil de leer (al menos no para el lector español que se perderá, como yo, en más de una ocasión), pero vale la pena dejarse llevar y disfrutar de una de esas novelas negras que sobrepasan los límites del género.
Muy recomendable.

12 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 12 de julio de 2009


Sábado. A medida que mis pasos me acercan al Fòrum me doy cuenta de mi error. Pero ya no hay vuelta atrás. Hoy se celebra el Sonisphere en Barcelona y yo he decidido asistir.

Nunca he asistido a conciertos de metal pese a que algunos de mis amigos son aficionados desde hace años y en mi colección de discos no faltan algunos destacados ejemplos del género. Hoy es mi bautismo de fuego y he elegido para iniciarme un festival con más de 40000 asistentes, dos escenarios y nueve grupos dispuestos a arrasar.

Entre los asistentes el número de mujeres es alarmantemente bajo. El hecho de no vestir de negro, no tener ninguna parte del cuerpo tatuada y/o perforada y no tener ni melena ni estar completamente rapado me hace parecer un inadaptado. Soy un freak. Pese a todo reina la tolerancia y parece que me van a admitir sin tener que sufrir ningún tipo de humillación.

Dice un sabio dicho popular “Allá donde fueres haz lo que vieres”. Me fijo en los especímenes que me rodean y constato que todos se acercan con ansiedad dipsómana (el calor aprieta) a las barras repartidas por el recinto (como en los Festivales “normales” pienso...). Por desgracia sólo puedes conseguir una bebida pagando con dinero del Sonisphere (unos billetitos muy majos y muy bien diseñados). Y allí empieza la penitencia. Conseguir los billetitos no es fácil y las colas en las taquillas de venta son impresionantes. Paciencia, observación y adaptación al entorno. Un cuarto de hora más tarde ya tengo la cartera llena de billetes de curso legal en todo el recinto del Festival.

Me hago con mi primera cerveza (de litro, aquí es todo a lo grande) y me acerco al escenario donde Mastodon están luchando contra una sonorización muy deficiente. Empiezan sonando rematadamente mal y, poco a poco, remontan un poco (pese a todo la batería seguirá sonando como el culo en los últimos temas). Son potentes y convincentes, lástima que su concierto no esté a la altura. Hacia el final me encuentro con Jordi R. y Xavi “manager” (a lo largo de la tarde se sumarán también Teki y Pep).

Lamb of God suenan mucho mejor pero su oferta no me interesa tanto. Pese a eso, entre cerveza y cerveza (comprada con dinero ful, que parece que no gastes pasta de verdad), vemos la mayoría del concierto. Me distrae también la variedad de camisetas (la mayoría de los grupos que hoy actúan), los tatuajes en lugares inverosímiles y seguramente harto dolorosos y la cantidad ingente de practicantes del Guitar Air (algunos de ellos con una habilidad sorprendente).

Escuchamos – más que vemos – un poco del concierto de Down y nos acercamos al escenario principal para coger sitio y ver el concierto de Machine Head. Cuando arranca el concierto me doy cuenta del error que ha supuesto situarse cerca del escenario... pero ya es tarde para rectificar. Durante los cuatro primeros temas soy vapuleado, empujado, pisoteado, regado con cerveza, golpeado por vasos de cerveza vacíos (el contenido de los cuales ha regado a mis vecinos), latigado por los pelos de un practicante del “molinillo craneal”, empujado de nuevo y agredido por unos bajos brutales a un volumen hiriente. Tengo una edad y quiero seguir cumpliendo años. Poco a poco y con la ayuda de Xavi y Jordi consigo alejarme de la zona cero y recupero la tranquilidad.
Cervezas para calmarme. Ya he tenido bastante por hoy. Se que me pierdo el que a priori era el mejor concierto de la noche pero pienso que ya habrán más oportunidades... o no. Lo he pasado bien... pero no hay que abusar de lo bueno... y de esto tampoco.

Hoy domingo recupero fuerzas en casa de Kris y Tony que, como siempre, nos acogen con la hospitalidad que les caracteriza. Me siento bien en su jardín de la alegría mientras Cass corre perseguido por Ska (en su ya tradicional danza de no apareamiento).

10 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 10 de julio de 2009


Primero fue el coche. Después de muchos años, de muchos viajes y de muchos buenos momentos, inició su último viaje.
Poco después fue mi trabajo el que me abandonó (lo había hecho hace tiempo y seguíamos juntos por inercia).
Ahora la lista de abandonos aumenta con la baja por enfermedad (espero que no grave) de nuestro dvd grabador. Su ausencia deja un vacío importante en nuestras vidas... ha sido substituido por su antecesor en el cargo – el viejo VHS – que cumple con abnegación con sus obligaciones. No es lo mismo, pese a su profesionalidad carece de los conocimientos y capacidades del DVD. Tras intentarlo arreglar en la tienda que me lo vendió (fracaso total al estar fuera de garantía) y en el fabricante (Woxter, que, sin tener el equipo en las manos me presentó un presupuesto por dos tercios de su precio más portes de envío a Madrid por mi cuenta. El precio total, con la posibilidad de sorpresas desagradables, se acercaba al de un equipo nuevo. Decepcionante marca), me he decidido por llevarlo a un técnico “de toda la vida”. Espero que sigan funcionando como hace unos años y que pronto tengamos de vuelta a este elemento imprescindible para el ocio en nuestra casa.

Poco a poco voy tomando las riendas de mi tiempo. Siguen surgiendo imprevistos a diario, pero cada vez empiezo a moverme con más soltura en el océano de tiempo del que ahora disfruto.

El miércoles quedé con Jordi P. para hacer una gestión. La gestión se convirtió en un par de cervezas en el Kasparo. Las cervezas en una agradable comida en el Bollywood (Avda. Drassanes, 27-29 Barcelona. Teléfono:93 518 18 89), un indio en el que nos sirvieron un menú de degustación (todo estaba muy bueno) en una bandeja carcelaria mientras en una pantalla de televisión reproducían espectaculares escenas de baile de películas indias. Y la comida en el Bollywood se convirtió en una degustación de cervezas y un animado debate en un bar (también carcelario) del Raval. Hace cinco años que no disfrutaba de esta capacidad de improvisación y disfruté mucho de la sensación y de la compañía.

Por las mañanas veo el encierro, algunos días sólo y otros en compañía de María José. Después leo, paseo, soluciono temas pendientes desde hace tiempo y hago de amo de casa. Esa es mi rutina ahora.

Stieg Larsson, la reina en el palacio de las corrientes de aire

He acabado “La reina en el palacio de las corrientes de aire” de Stieg Larsson y, sin participar en el campeonato mundial de velocidad lectora en el que se ha convertido cualquier conversación sobre el libro (y que suele concretarse en “Yo lo leí antes y en sólo 10 minutos”), tengo que confesar que me ha atrapado más incluso que sus antecesores y que esta noche he dormido poco. Muy recomendable para pasarlo bien durante unos días (para algunos, unos minutos) este verano.

Ah, y aunque a mí no me importa, hoy es viernes.

06 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 06 de julio de 2009


La novela negra y el verano tienen una conexión evidente cuyas razones se me escapan.Misterioso Isaac, Jerome Charyn

Pasando un calor espantoso he leído una novela muy negra de Jerome Charyn. Política, polis duros, corrupción, putas, asesinatos y dinero bien mezclados entre Nueva York e Irlanda.“Misterioso Isaac” es la primera de las muchas que van a caer este verano y me ha gustado lo suficiente como para seguir leyendo la serie de novelas protagonizada por Isaac Sidel (este es el cuarto volumen de la serie).

Fin de semana de recién nacidas (hemos conocido a Noa y a Julia), de cenas de cumpleaños (hoy Jordi P. cumple 40 – si lo ves, felicítale -y lo celebramos anticipadamente) y de cenas de reencuentro con la familia (mis padres volvieron de vacaciones y lo celebramos con Eli y Cesc que se van esta semana).
También ha habido tiempo para el Dirty Harry (de nuevo en funcionamiento tras reemplazar una goma de un rebotador) y para la segunda (y última, y corta) temporada de “Jericho”.

03 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 03 de julio de 2009


Van pasando los días y mi sensación de vacaciones va en aumento. Cass se ha recuperado de una pequeña lesión y hemos empezado a hacer largos paseos que aprovecho para conocer mejor mi ciudad. He vuelto a pisar la cocina después de mucho tiempo y la lista de tareas pendientes va disminuyendo.

Ayer por la noche nos reencontramos con Albert y Esther en una más de nuestras habituales cenas. Esta vez Marta no pudo venir y en su lugar se apuntó Marga. El restaurante escogido – esta vez les tocaba elegir a Albert y Esther - fue el Visual. Nunca había disfrutado de unas vistas semejantes sentado en una mesa.

Se me olvidaba. Para los que eso importa, hoy, por fin, es viernes.

RESTAURANTE VISUAL (Hotel Torre Catalunya)
Avda. de Roma, 2-4, planta 23
Barcelona
Teléfono: 93 600 69 96


enlace a la web del restaurante Visual

restaurant Visual, la foto es del mismo restaurante pero se queda corta en lo que a vistas se refiereEl restaurante está situado en la planta 23 de la Torre Catalunya. Y es precisamente su ubicación el principal atractivo. Las vistas de las que podremos disfrutar sentados en una de las mesas del Visual son únicas. Podemos escoger ver el mar o la montaña, Monjuïc o la Sagrada Familia... pero desde cualquiera de las mesas tenemos asegurada una panorámica sensacional de la ciudad de Barcelona.
Si entramos en temas gastronómicos la cosa ya empieza a chirriar un poco. Intentaré explicarme sin hacer demasiada sangre.
Para picar pedimos algunas tapas para compartir: jamón con pan de coca (correcto, sólo faltaría), crujientes de queso manchego con mermelada de cebolla (sin alegrías los crujientes y mejor con la mermelada), bombas de ceps con pan de especias y membrillo (ricas pero de nuevo sin alegrías) y las que ellos llaman “nuestras patatas bravas” (y esto requiere un punto y aparte). Porque quizás si que las patatas – con una presentación muy cuidada – eran suyas... pero en absoluto eran bravas. Ponerle ketchup a una patata no la convierte en patata brava (y si no era ketchup Heinz lo que acompañaba a las patatas que ayer me comí, era una salsa que sabía exactamente igual). Impresentable.
Después de esta gran decepción, llegaron los segundos: rape con shitakes (muy bueno) dorada (que al final no fue con salsa de mejillones, pero estaba muy buena) y tataki de atún con bloody Mary (que resultó ser una salsa demasiado parecida a la salsa de las bravas como para no reseñarlo, el cocinero loco del ketchup volvía a la carga).
Los postres, sobretodo mi pastelito de chocolate con leche y kikos con polo de maracuyá, remataron bien la cena.
El precio (algo más de 60 euros por persona) me parece excesivo dado que los errores en la cocina son más que notables. ). Una lástima porque el lugar es encantador y las vistas garantizan una buena velada.
Bebimos un par de botellas de Jean Leon blanco pero no miré la carta de vinos para ver el precio (seguramente las botellas influyeron mucho en el precio de la cena).
¿Recomendable? Lo dejo a vuestro criterio, depende de lo que busques.
¿Volverás? No lo descarto. Pese a todo, en conjunto la cena resultó muy agradable.

01 julio 2009

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 01 de julio de 2009


Algunos – entre ellos yo – pensaban que con mi, recientemente adquirido, excedente de tiempo, las publicaciones en este diario iban a ser más regulares. Nada más lejos de la verdad.
Estos dos primeros días han estado llenos de horas libres, pero también de actividades nuevas. Al papeleo que supone oficializar mi nueva situación laboral, he sumado otras actividades como contestar a llamadas de compañeros y amigos, enviar mensajes de despedida y responder a los que me llegan preocupándose por mí (gracias a todos, a los de las llamadas, a los de los emails y a los que habéis pensado en hacerlo pero os ha faltado tiempo/ganas), organizar mi tiempo y ordenar el caos que amenazaba con hundir mi mesa para poder empezar a trabajar en condiciones seguras e higiénicas.

También ha habido tiempo para la lectura, para comer y cenar con María José en el patio de Graceland (la barbacoa funciona a buen ritmo) y para dejarme invitar por Jordi P. al concierto de U2.

Nunca he sido fan de U2. Es más, mis amigos – entre ellos Jordi – me han oído rajar en más de una ocasión de los irlandeses y de sus “himnos de estadio”. Y ayer, tuve que tragarme parte de mis prejuicios al contextualizar los temas de U2. Sus canciones – que me han acompañado desde hace más de 20 años y forman parte de mis referencias culturales pese a mi no militancia en las filas de sus fans – están hechas para ser escuchadas en un estadio y dentro de un espectáculo como este. Ahora las entiendo mejor.
u2 en barcelona, día 1 de la gira 360º
El espectáculo que tuve la suerte de ver ayer, es de los más impresionantes que nunca he visto y la música – aunque me queráis hacer creer lo contrario – es sólo un elemento más. La mejor realización de pantallas que he visto en mi vida (y me suelo fijar mucho) proyectada en una pantalla espectacular (que subía, bajaba, crecía, menguaba... que estaba viva), iluminación brutal (valida para la visión en directo del concierto y muy cuidada para su reproducción en la pantalla jugando con claros y oscuros, con colores cálidos y fríos, con humos y flashes...), un sonido impactante e impecable, temas musicales que forman parte de nuestra vida (algunos llevan 20 años con nosotros sonando con regularidad en hilos musicales y medios de comunicación), gadgets dignos de 007 (un traje con luces laser, un micro trapecio, puentes que se mueven, conexiones con la Estación Espacial Internacional...), un escenario original y lleno de posibilidades, coreografías aparentemente casuales apurando las posibilidades del escenario pero con un gran trabajo detrás, un bonito homenaje a Michael Jackson, un poco de ecología y buen rollo humanista y cerca de 90000 personas totalmente entregadas (parte fundamental del espectáculo y que respondió de una manera impecable).
Con toda esta parrafada he querido decirte que, si tienes oportunidad de ver la gira 360º de U2, no te la pierdas. Aunque no te gusten demasiado U2. Gracies Jordi.

En el apartado de lecturas, hoy quería destacar Macanudo 5 de Liniers. Macanudo 5, LiniersYa lo he dicho más de una vez por aquí, me gusta Liniers y su humor que mezcla lo cotidiano y lo que no lo es con ternura e ironía. Por lo tanto he disfrutado con Macanudo 5. Quería destacar, no obstante, el relato que lo cierra. “El Inquilino” es una historia larga (4 páginas es mucho para Liniers que es capaz de construir una historia en una sola viñeta). Un cuento gótico que tiene mucho de miedo, de incertidumbre, de perplejidad ante lo desconocido... ríanse ustedes de “El sexto sentido”, descubran lo prescindible que es “Los Otros” y lo fútil de “El Orfanato”. ¿Para cuando una película?