26 junio 2012


DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 26 de junio de 2012

Miguel Fuster. Miguel 15 años en la calle. Llorarás donde nadie te vea
"Miguel 15 años en la calle. Llorarás donde nadie te vea" es un sobrecogedor relato de Miguel Fuster. Miguel, dibujante profesional, tuvo mala suerte y acabo viviendo en la calle. Sus cómics nos hablan de su experiencia, de esa Barcelona paralela a la que todos conocemos, con un dibujo atormentado, duro y extrañamente fascinador. No es un cómic fácil pero es un cómic necesario que nos muestra la cara B de la ciudad. El que he leído es una segunda parte, buscaré el primer tomo.

Y mientras, celebramos la verbena de "Sant Joan", como siempre, rodeados de amigos pero este año en la terraza de Mariona. Al día siguiente recuperación. Y, ya repuestos, vuelta al trabajo. Se ha hecho corto el fin de semana.

23 junio 2012


DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 22 de mayo de 2012

Hace años las celebraciones tenían fecha fija. Ahora, abrumados por largas jornadas laborales y por nuestras mermadas condiciones físicas, aplazamos las celebraciones hasta que el cuerpo y las circunstancias lo permiten. Viernes noche. María José y yo decidimos celebrar nuestro aniversario con una cenita en el Mug (Roselles, 14 08901. L'Hospitalet de Llobregat). El Mug es un pequeño restaurante que me recomendó Jaume (que se está convirtiendo en una referencia en lo que a locales en nuestra ciudad se refiere), ofrece cocina de mercado en pequeños platillos a medio camino entre la tapa y la ración. La carta es extensa y cuesta decidirse. Alcachofas fritas con romesco, tempura de verduras, tataki de atún, patata al mortero y magret de pato a la piedra... todo delicioso. Queda sitio para el postre, una cascada de tres chocolates que también está muy buena. El local es pequeño pero, como todavía es pronto, se está muy bien. Volveremos. Rematamos la noche con un paseo por el centro de l'Hospitalet y un Jack Daniels frío en l'Oncle Jack.

Esta semana he acabado mi paseo por la cumbre del mundo de la mano de Jiro Taniguchi y Yumemakura Baku. De un tirón acabé con la quinta entrega de esta saga montañesa.

Andrew Bird (su Break it yourself) pone banda sonora al diario de hoy. 

21 junio 2012


DIARIO DE UN OCIOSO
Jueves, 21 de junio de 2012

Mequinensa en el TNC. Un texto basado en la obra de Jesús Moncada, buenas intenciones (recuperar una manera de ser, de hablar, de sentir y un momento histórico concreto), un arranque prometedor y más que correctas interpretaciones (sobretodo la de Carles Martínez que está, como siempre, impresionante). Pero Mequinensa no acaba de funcionar; personajes demasiado arquetípicos y escenas sobreras que se hacen tediosas me dejan con la sensación de que se ha superado el límite de elasticidad y que Mequinensa tiene más minutaje del que puede soportar. Una lástima.

Y el lunes tocó volver a trabajar. Mucho. Y, en medio de ese vacío ocioso, un aniversario que no puede pasar inadvertido. 22 años ya, y con ganas de sumar muchos más.

19 junio 2012


DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 16 de junio de 2012

Fuerzas recuperadas. Por fin, tras 7 años en Graceland, tenemos cabezal en la cama. María José ha reciclado unas maderas que le dieron y ha hecho un cabezal chulísimo. Tras la mañana de descanso en Graceland, hay que volver al Sónar.

Llego al recinto del festival antes de lo previsto y aprovecho para visitar, en el Macba, la exposición dedicada a Gordon Matta Clark (impresionante) y la también muy interesante "Le Corbusier y Jean Genet en el Raval". Pero he venido por la música y empiezo con la actuación de "Cornelius presents salyu x salyu". En esta ocasión el músico japonés presenta a un cuarteto de música vocal. El resultado, sorprendente y fresco, es un buen concierto más cercano al pop que a la música electrónica. No me gusta tanto Maria Minerva en la Capella dels Angels, mejor el marco que el contenido. Así que vuelvo al mismo escenario para ver la impactante actuación de Diamond Version i Atsuhiro Ito.

Pausa sónica. Cena en casa con Jordi P, María, Víctor, Laura, Carol y María José.

Y otra vez a cumplir en el Sónar. Empiezo con el concierto de The Roots. Las espectativas eran ver un buen concierto de Hip hop se ven superadas cuando me encuentro con un excelente concierto de música variada - rock, hip hop, funk, ramalazos de blues correoso -, unos músicos excelentes, un ritmo infernal y un sentido del espectáculo cuidado hasta el mínimo detalle. Los directos bien engrasados son una delicia, y el concierto de The Roots - con medleys de versiones incluidos, consigue dejarme con una sensación de plenitud dificilmente superable. Die Antwoord son unos cafres. Poligoneros, ofensivos, facilones... pero su concierto es una bomba de hip hop de guerrilla, provocaciones y esa voz de la cantante - dolorosamente aguda - que ofende y gusta a la vez. Me lo paso en grande. Remato la noche con los últimos temas de Hot Chip que, en el otro escenario grande, tienen montada una fiesta no menos movida pero igual de interesante.

La noche sigue, pero yo ya tengo bastante. Ya queda menos para la próxima edición del Sónar.

17 junio 2012



DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 15 de junio de 2012

He decidido que, para disfrutar del Sònar, necesito el día libre. Mis vacaciones serán más cortas, pero el día promete intensidad.

Me encuentro con Jordi P. (que ha tomado la misma sabia decisión que yo) en el Kasparo. Ya en el recinto empezamos a deambular por los diferentes escenarios y a consumir las primeras cervezas de la jornada. Buen ambiente (los zombies de pupilas gigantescas aún no han salido de sus cuevas), es la hora ideal para ver las exposiciones del SonarPro y, en el Macba,  una instalación interesantísima (The Game of Life ) que propone una nueva manera de reproducir la música y "Oferta Pública" de Rita McBride.

El Sónar es también un generador de felicidad (en muchos casos potenciada por el consumo de fármacos pensados para ello) y es una gozada ver tanta gente sonriente, tantos momentos intensos y tanta diversión. Pero el exceso de  "buenrollismo" provoca un cansancio importante. Decidimos recuperar fuerzas en Carlota Akenaya (Pintor Fortuny, 32). El Carlota Akenaya es un restaurante Sumiyaki (barbacoa japonesa). Buenos detalles (como disponer de una jarra de agua en la mesa), servicio amable y todo está muy bueno. Volveré seguro ya que está cerca del trabajo.

Repuestos, nos entregamos a una larga jornada de paseos entre escenarios, cerveza y conversación. Vemos algo de "Supersilent feat. John Paul Jones", de Nightwave, de Flying Lotus, de Austra y de otra gente que - programa en mano - soy incapaz de identificar. La jornada se ha convertido más en una fiesta que en un día de conciertos. El Sónar también es esto... Felicidad en buena compañía, grande.

Dejo a Jordi a las puertas del concierto de John Talabot y vuelvo a casa para recuperar fuerzas de cara a la noche. Con María José vemos series y, cuando llega el momento de salir para una intensa noche de conciertos, decido que las fuerzas me han llevado hasta aquí y que no hace falta llegar al límite. Mañana será otro día.


DIARIO DE UN OCIOSO
Jueves,  14 de junio de 2012

Empieza el Sonar 2012. A mediodía consigo escaparme media horita para hacer una cata del ambiente. Las primeras horas del festival son las mejores y siempre me recuerdan a las primeras - y poco concurridas - ediciones.

Trabajo hasta tarde y, todavía con el uniforme de trabajo, me acerco al recinto de Gran Vía l'Hospitalet para ver el concierto inaugural (sólo una pregunta: ¿Porqué es inaugural si el festival ya ha empezado hace muchas horas?).

Calentando motores unos efectistas The Pinker Tones. Solo veo un par de temas.

Y llega el concierto de la noche. New Order. Un par de momentos grandiosos: "Bizarre Love Triangle" y "Blue Monday", sonido viejuno, ejecución correcta y público entregado. Seguramente es mi último concierto de New Order... pero no lo paso mal.

10 junio 2012


DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 10 de junio de 2012

Se agota el fin de semana. Descanso, lectura, tele (fútbol y alguna serie), desayunos en el patio, mi primera empanada (de atún, salió buena) y una grandísima obra de teatro.

En el TNC brilla, por segundo año consecutivo, Agost. Un texto de lujo de Tracy Letts, una escenografía impresionante, una buenísima dirección de actores por parte de Sergi Belbel y un reparto que se deja el alma en cada representación (todos están bien pero Anna Lizaran roza la perfección y Jordi Banacolocha, Maife Gil, Emma Vilarasau y Rosa Renom no le andan a la zaga). Drama y comedia, más de tres horas de buen teatro. Imprescindible.

Sigo enzarzado en la maratoniana - y muy gratificante - lectura de "La Cumbre de los Dioses" de Jiro Taniguchi y Yomemakori Baku. He acabado el cuarto volumen y los efectos de leer al revés empiezan a notarse. Ahora, cuando leo un cómic occidental, dudo del sentido de las viñetas en una misma página... lo que no me ha impedido disfrutar como un enano con la relectura de "Vida en otro planeta" de Will Eisner y del repaso que, sin prisas pero sin pausas, les estoy dando a mis Asterix.

Ya falta menos para el próximo fin de semana.

08 junio 2012


DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 08 de junio de 2012 

Jueves. El Sònar presenta su decimonovena edición en el mirador del CCCB. Asistir a la presentación, este año más concurrida que nunca, supone un reencuentro con viejos conocidos y una tradición que me gusta respetar. El gusano, calmado con las generosas dosis de Primavera Sound a la que fue sometido, vuelve a moverse en búsqueda de más. Sólo tendrá que esperar una semana.

Por la tarde acudo a la inauguración de la Custo Gallery en La Rambla. Originales de Custo Dalmau mostrando su proceso creativo se convierten en objetos de exposición. El ambiente - gente guapa (y otros, como yo, no tanto), dj ambientando y gin-tonics buenísimos - es atractivo.

A pocos metros, en la Sala Parés, los cuadros de Marcos Cárdenas y de Javier Vázquez se dan la mano. Me los llevaría (casi todos) a casa (sin pasar por caja a poder ser).

Viernes. A mediodía me acerco a la muestra de vinos catalanes que están haciendo junto al  Mercado de Santa Caterina. Hasta el domingo podéis probar los mejores vinos de algunas de las mejores bodegas catalanas. Cristina me invita a probar una de las joyas de su bodega: el Mas Rodó Macabeo. Con Cristina compartimos trabajo hace ya muchos años. Los dos hemos hecho un cambio laboral recientemente y los dos estamos contentos. Hace sol y el vino está buenísimo. No se puede pedir más.

Después por la tarde volveré a trabajar. Pero será por poco rato.

Ya con María José, cocino y nos preparamos para disfrutar del fin de semana mientras el partido de inauguración de la Eurocopa resulta mucho más emocionante de lo esperado (dos expulsados, un penalti fallado... y empate final). Eurocopa, Olimpiadas... mucho trabajo por delante.

07 junio 2012

DIARIO DE UN OCIOSO

Miércoles, 06 de junio de 2012

Hace unas semanas, Ignacio Lloret presentó en Barcelona su libro "Tu alma en la orilla". Fui a la presentación, me compré el libro y recordé viejos tiempos junto a Ignacio y a algunos compañeros de clase.

He de reconocer que me daba un poco de miedo y de pereza leer el libro de Ignacio. Miedo por leer algo de una persona a la que conoces (después me di cuenta que, pese a haber compartido aula durante unos cuantos años, no conocía de nada al Ignacio adulto y que en realidad era como leer el libro de un completo desconocido). Y pereza por el compromiso que supone leer algo y tener (o no) que dar una opinión sincera. Al final me decidí y estoy muy contento de haberlo hecho. "Tu alma en la orilla" nos explica siete años de una relación de pareja a través de veinte capítulos localizados en veinte playas. Ignacio consigue, contando una historia particular, hacer que todos nos sintamos reflejados y partícipes de sus reflexiones. "Tu alma en la orilla" no es una novela (pero tiene mucho de novela), no es un libro de viajes (pero tiene mucho de ese genero que siempre fascina), no es un diario personal (pero, reales o no, las anécdotas que cuenta tienen mucha verdad), no es un libro de reflexiones sobre la pareja (pero hay muchas y te anima a reflexionar) y tampoco es un libro sobre literatura (pese a que está lleno de referencias literarias y cinematográficas). Ignacio Lloret recoge todos estos géneros y crea con ellos un relato amable, ágil y fácil de leer. Me ha gustado leerlo, veo que al menos uno de los cuarenta y dos aprovechó las clases de lengua.

Después de una mañana de trabajo especialmente intensa no tengo tiempo de ir a casa a comer. Decido hacer una pausa y con mi nuevo libro en la mano (siempre hay que llevar el segundo para no quedarse sin lectura) me acerco a Los Azulejos (Trinitat, 3 Barcelona. Teléfono: 93 304 19 79). Aunque comeré el menú, decido regalarme antes un tequila reposado que hará más fácil el tránsito del trabajo al descanso. En Los Azulejos hacen comida mexicana y, aunque está excesivamente adaptada al gusto español para mi gusto, disfruto mucho comiéndome unos molletes, unos tacos de pastor y recuperando combinaciones de sabores que llevaba tiempo sin encontrar. Volveré pronto.

El Primavera Sound siempre tiene efectos colaterales. Llevo días escuchando mucha música. Discos de grupos que escuché en el festival como Kings of Convenience, Nick Garrie y Rufus Wainwright, y también fantásticos discos de bandas que no escuché en el Primavera como el "11 de novembre" de Silvia Pérez Cruz, el "Little broken hearts" de Norah Jones o el "Tot Sants" de Refree.

03 junio 2012



DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 03 de junio de 2012

La vida sigue a pesar del Primavera Sound y hoy toca, por suerte, una alegre y acompañamos a Barbara y David en su boda.

Cambio de uniforme y, ya con look festivalero, salimos con destino al recinto del Fòrum. La suerte nos acompaña y podemos aparcar a pocos metros de la rampa que da acceso al Festival.  Llegamos a tiempo para ver el inicio de actuación de Kings Of Convenience. El pop de los noruegos es delicioso pese a que su música se diluye en un escenario tan grande como el San Miguel (uno de los de más capacidad del festival). Un inicio suave y agradable.

Llega el temido momento de tomar decisiones. Entre Beach House, Real Estate y Dominique A, nos quedamos con el francés. Y su música no decepciona en directo. Potente, impecable sonido... María José - mejor equipada tecnológicamente que yo - me recuerda que está a punto de empezar la actuación de Josh T. Pearson en el Auditori. Llegamos algo tarde pero disfrutamos de uno de los momentos del festival. La desnudez con la que defiende las canciones de su impresionante "Last of the country gentelmen" pone la piel de gallina. Por eso, descubrir entre canción y canción, su faceta como monologuista que se parte en el escenario con sus chistes malos sobre músicos, es un contraste gigantesco.

Al volver al recinto del Fòrum, María José y yo conseguimos reunir las suficientes monedas para comprar un bocadillo a medias (por suerte en las barras se puede pagar con tarjeta). Saint Etienne suenan - y sobretodo se ven - viejunos. Los cambiamos por unos Chromatics aconsejados por Jordi P. Mucho mejor.

Sólo queda tiempo para rematar el Festival. Lo hacemos con la actuación de Yo la Tengo. Son unos clásicos, pero nunca decepcionan. Guardianes de las esencias del rock, los de Hoboken ofrecieron el colofón ideal para mi festival.

Tras su actuación empezamos la larga vuelta a casa. Estamos muy cansados. Ha sido un buen día.

02 junio 2012



DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 2 de junio de 2012

Hoy, como podéis suponer, también toca crónica del Primavera Sound 2012. Segunda jornada en el Fórum. Hoy ya con María José. Tras sortear el laberinto que lleva hasta el Auditori del Fòrum, disfrutamos como enanos con el delicioso concierto en el que Nick Garrie reinterpreta su "The Nightmare of J.B. Stanislas". Delicioso. Conciertos como estos son los que hacen del Primavera Sound el excelente festival que es.

Hay otro detalle que me ha gustado mucho. La organización del Primavera Sound ha colgado la camiseta de Pedro San Martín como homenaje al bajista de la Buena Vida. Una enorme camiseta, con el diez a la espalda, lo homenajea y nos lo devuelve, aunque sea por un rato.

Tras el primer concierto, comemos (no habíamos tenido tiempo de hacerlo) y Jordi P. se nos une en los cafés. Tras la pausa, seguimos. Other Lives hacen un pop barroco que, por su complejidad, es difícil de defender en directo. Los de Oklahoma lo consiguen y el resultado es un directo tan variado como sorprendente.

Paseo por la feria Flatstock (posters de conciertos) y con Núria y un montón de gente más, nos rodeamos de fans de The Cure (que llevan horas esperando y seguirán esperando unas horas más) para ver a Rufus Wainwright. Rufus es único. Empieza su concierto a capela y, acompañado por excelentes músicos y un par de coristas brutales, ofrece canciones nuevas y viejas, tristes y alegres, homenajes a su familia y todo regado con esa voz prodigiosa y esa aparente facilidad con la que canta. Un regalo que se hizo extremadamente corto.

El próximo concierto es The Cure. Hacemos tiempo, paseamos y nos colocamos en una zona cómoda. Pero la organización del festival comete un error al no hacer coincidir ningún concierto con el de The Cure. Esto provoca un colapso importante y la imposibilidad de ver el concierto en condiciones. La concesión a la nostalgia tiene un límite y decidimos abandonar (el estado poco prometedor de los músicos y la poca energía con la que acometen los primeros temas nos ayudan en la decisión). Cena y paseo por los escenarios desérticos del festival.

El infierno debe ser algo parecido al espacio que queda entre los escenarios donde Sleigh Bells (brutal, sorprendente, efervescente y algo cansina) y Napalm Death (igualmente brutales, machacones, ruidosos y muy cansinos) empiezan a demoler a su público. Al pie de las escaleras se mezcla el sonido residual de los dos conciertos, una especie de castigo para almas perdidas. Decidimos dejarlo por hoy, pasamos por delante del escenario donde The Cure (parece que tienen más aguante que el que anunciaba su demacrado aspecto) siguen defendiendo sus clásicos.

Pero el Primavera Sound no detiene el resto de la vida que sigue dándonos alegrías y tristezas. Un petó Lluís.

01 junio 2012


DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 01 de junio de 2012

La prima de riesgo desbocada, los mercados ansiosos por lanzarse a por nuestros cuellos, el país en manos del registrador de la propiedad de Santa Pola... y encima hay descerebrados que se cogen fiesta en el trabajo con la peregrina excusa de que hay un festival de músicos raros. Yo soy uno de esos descerebrados.

Descanso por la mañana y, a primera hora de la tarde, ya estoy en la puerta del festival para empezar - con buen pie - con la actuación de los locales Pegasvs. Pese a que el escenario les diluye y que, sobre él, pecan de sosos, me gusta lo que escucho. La actuación es corta y me permite acercarme al escenario donde La Estrella de David están acabando su actuación. Me encuentro con Jordi P. y, juntos, vamos a ver a Baxter Dury. Divertido, brillante, acompañado de una banda tan heterogénea como potente, Baxter Dury se convierte en la primera sorpresa agradable del festival. Un poco de Archers Of Loaf, un paseo por la feria discográfica y conciertazo de The Afghan Whigs. Han pasado más de diez años desde su separación y - aunque sea por la pasta - han vuelto con fuerza. Contar con un frontman como Gregg Dully es garantía de espectáculo y eso es lo que los Whigs ofrecieron con cierta tendencia al rock de estadio que no me desagradó, al contrario.

Las fuerzas flojean y hay que recuperarlas. Mientras nos comemos un bocadillo, nos encuentran Jordi R y Núria. Desde las gradas vemos a Mudhoney. Venía por la nostalgia y por sus discos que todavía atesoro con cariño, pero siguen teniendo un directo muy potente y lo paso muy bien. Tanto que me quedo hasta el final perdiéndome el arranque de Wilco. Impecables en directo, los de Jeff Tweedy ofrecen un show sin fisuras. Buenos temas, sensibilidad a raudales e impecable interpretación.

Ahora si, las fuerzas flojean, intento recuperarlas con unas desastrosas patatas fritas y me encuentro con Olivia y Roberto. Ellos, todavía con fuerzas, se van a dar una vuelta. Yo, agotado, me siento en las gradas para ver - desde muy lejos - la devastadora actuación de Refused. Hardcore pasado de vueltas, actitud punk y reivindicación. En palabras de su saltarín frontman "una reivindicación de hace 15 años que hoy es todavía más vigente".

Y llego en estado semi comatoso al concierto de la noche. Franz Ferdinand tienen otro directo sensacional, saben controlar los tempos, tienen un montón de hits con los que ir trufando el setlist, son buenos y lo saben. Rodeado de masa no crítica, lo paso en grande dejándome que me boten, que me zarandeen y que me griten al oído los pegadizos estribillos de sus canciones. La música sigue, pero para mi, el concierto de Franz Ferdinand es un gran final para una grandísima primera jornada de Primavera Sound 2012.