30 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 29 de septiembre de 2007


Llega el viernes después de una dura semana y los malos momentos pasados se suavizan.
Dejo atrás el trabajo y me encuentro con Jordi P. en la puerta de Apolo. El Lorito celebra su primer año en la red y, para dar lustre a tan festivo evento, organizan un concierto con Micah P. Hinson y Manta Ray.
El concierto ha empezado demasiado pronto y cuando llegamos – pasa poco de las 9 de la noche – Manta Ray están acabando su actuación. Enérgicos – como siempre – y demasiado fríos en el escenario – otra de sus señas de identidad – sus temas suenan con mucha fuerza. Disfrutamos de los pocos temas que quedan mientras nos bebemos esa imprescindible primera cerveza (pagada al abusivo precio de 4 € y servida en un lamentable vaso de plástico), ha sido una lástima no haber podido disfrutar del concierto entero.
Mientras esperamos que empiece el concierto de Micah P. Hinson y tomamos la segunda cerveza (pese al insultante precio llegarán más) comentamos las últimas novedades del pequeño mundo en el que nos movemos y me encuentro con Francesc S. (un antiguo compañero de clase – estuvimos juntos hasta 5º de E.G.B.-. Verlo y pensar que él debe ver en mí lo mismo, me hace ver que nos hemos hecho mayores, más de lo que creemos o queremos creer).
Micah. P Hinson sale sólo al escenario – después le acompañará únicamente un batería – y empieza a desgranar su interesante repertorio con fuerza, entrega y esa fabulosa voz que consigue llenar Apolo en un momento. Canciones de autor que, desnudas en formato acústico, se acercan al folk y en ocasiones tienen pinceladas no lejanas a la country. Las canciones son buenas, el está en plena forma y se entrega en cada tema... pero pese a que el concierto me gusta mucho , no llego a conectar del todo en ningún momento. Seguro que soy yo el que no estoy receptivo ya que nada falla y, pese a eso, algo hace que no sea una noche mágica, que Micah. P. Hinson no esté ofreciendo uno de los conciertos de este año que recordaré con especial cariño.

Tras el concierto hacemos un bocata en el frankfurt que hay junto a la Sala Apolo. En las mesas hay tiradores de cerveza conectados a una pantalla de video que informa sobre el consumo y nuestros vecinos, seis nórdicos casi adolescentes, llevan 18 litros consumidos cuando nos levantamos de la mesa. Ellos siguen con su inalcanzable maratón de consumo cervecero y nosotros continuamos con un periplo callejero que nos llevará al London (demasiado ocupado a estas horas – todavía tempranas – por turistas que ven en él una atracción turística más) y a un Kebab donde remataremos la noche con una cerveza y un bocadillo de shawarma.

Sábado. El cansancio, la resaca que me golpea pese a que el consumo de cerveza no fue abusivo y un malestar general hace que, tras levantarme pronto, me vuelva a la cama para descansar.
Richard Haughton. Le Veillée des abysses de James Thiérrée
Por la noche vamos al TNC para disfrutar de “Le Veillée des Abysses” de James Thiérrée. Durante una hora y 20 minutos disfrutamos de un espectáculo total. En la poética obra de Thiérrée hay una exploración constante de las posibilidades expresivas del cuerpo humano, hay humor, danza, música, trapecismo, contorsionismo, mimo... pero sobretodo hay magia.
Es ya domingo cuando escribo esto, hoy es el último día y las entradas – creo – están agotadas... una lástima si no tienes una de ellas ya que el espectáculo, que sirve de pistoletazo de salida para la temporada teatral del TNC de este año, es una maravilla cuyas imágenes me acompañaran durante mucho tiempo.

Suena el "A Dream of Her" de Micah P. Hinson y no entiendo cual es la oscura razón que hizo que la noche del viernes no cuajara uno de los conciertos del año.

27 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 26 de septiembre de 2007


Martes noche. Vemos un rato de tele (el “24” de la semana pasada), decidimos irnos a dormir y, pocos minutos después, el vecino decide dar el pistoletazo de salida a una fiesta en la que, si hacemos caso a los gritos, participa la totalidad de la asociación nacional de sordos, y en la que, si tenemos en cuenta los “razonamientos” que esos gritones intentan balbucir (algunos nunca formulados antes y de gran calado intelectual como el filosófico: “yo creeeeeeré en la monarquía cuando sea reeeey”), se consume la práctica totalidad de las existencias etílicas de mi pueblo.
Con semejante celebración, que acaba sobre las seis de la mañana – minutos antes de que nuestro despertador suene -, nuestro sueño deja bastante que desear.

Intentamos recuperar tiempo y sueño a lo largo de la mañana.

Público. Número 1
La salida al mercado de un periódico nuevo tendría que ser una buena noticia. Y creo que lo es pese a lo innecesario que me parece una vez analizado su número 1. Público es el nombre de este nuevo periódico que nace bajo el ala del grupo mediático Mediapro. Lo mejor del nuevo periódico es su tamaño (manejable sin ser demasiado pequeño), su precio (0’50 €) y la acuarela de Barceló que figura junto a la cabecera y que se convierte en logo del periódico.
Lo peor es esa estética entre rancia y de periódico gratuito y, sobretodo, esa redacción - de titulares y contenidos – propia de esos diarios gratuitos. Creo que si lo que el público quiere es ese tipo de “periodismo” (lo entrecomillo porque no creo que sea periodismo lo que se hace al reinterpretar noticias de agencia para hacerlas espectaculares y atractivas para un público que no lee) ya tiene los periódicos gratuitos que convierten en innecesaria la misma opción pero de pago.
¿Exagero? Aquí tenéis alguna perla extraída del periódico del miércoles 26.
Titulares como: “Un niño despierta de una operación con acento pijo” (pp. 40)
Rellenar por rellenar: “La falta de sueño puede ser mortal” (pp. 33, sin duda hablando de mi vecino y su fiesta)
Periodismo creativo:“...Tal vez los vikingos aparcaron el drakkar para tomar unas cervezas y decidieron regresar en taxi, para evitar los controles de alcoholemia...” (pp. 40, no es la sección de humor, es la de investigación)
¿Escogemos bien las palabras?: “Los parques eólicos diezman a los buitres” (pp. 34, ¿los diezman realmente o simplemente matan a cientos de ejemplares cada año?)
Y podríamos seguir...
Me he olvidado destacar entre lo mejor el DVD con el que me obsequiaron ayer al comprar el periódico (“Los lunes al sol”). Si siguen con esta línea de obsequios, han ganado un comprador, que no un lector.
Ojalá cambien, si es así, la aparición de Público será una buena noticia.

José Saramago. Las pequeñas memorias
Acabo “Las pequeñas memorias” de José Saramago. Libro de recuerdos de infancia, delicioso en ocasiones, entretenido, tierno y muy divertido en algunas anécdotas. El libro se lee de una sentada pero se me antoja, no obstante, algo precipitado – si se me permite hablando del trabajo de un prestigioso escritor, de un premio Nobel -, poco trabajado en la escritura, como si de un borrador se tratara. Pese a eso, me ha gustado leerlo.

Acabo hoy con un beso para una amiga. No puc oferir-te mes que una abraçada y un petó. Ens fa mal el teu dolor, tant de bo t'ajudem a alleugerir-ho.

25 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 24 de septiembre de 2007


Una sesión de cine de verano en el patio de Graceland – vemos “Diamantes de sangre” en compañía de Mariona - pone fin a un larguísimo fin de semana. Han sido cuatro días de descanso lleno de actividades de ocio, la mayoría de ellas en Graceland o sus cercanías.

Mañana, día de vuelta a la realidad, echaré de menos las partidas de “Pang” con María José, las comidas en el “Osaka”, las sesiones de visionado de series (“Seinfeld”, “Entre fantasmas”, “Alias”), un largo paseo por las galerías de arte de Barcelona, una comida con amigos en casa de José María y Mónica – con larga sobremesa-, las risas, los paseos con Cass, los bocatas en el bar de la plaza, leer el periódico por la mañana... la libertad.

El Wintercase se acerca.

21 septiembre 2007

“...A los emigrantes los necesitamos y los odiamos. En cuanto llegan a un distrito, se topan con esa antipatía atávica del lugareño hacia el extraño, el forastero, con un odio que se repite desde los comienzos de la historia, desde la aldea más primitiva a nuestras granjas industriales. (...) Nunca logran ser admitidos en la comunidad ni en la vida de la comunidad. Son auténticos vagabundos a los que se les niega el derecho a integrarse en las poblaciones que necesitan de sus servicios...”
John Steinbeck. Los vagabundos de la cosecha.


“La emigración es la combinación de la esperanza humana y el movimiento; la esperanza se realiza a través del movimiento”
Ryszard Kapuscinki


“...hábiles, inteligentes y, cuando se les concede una oportunidad, socialmente responsables. Condenarlos al hambre e intimidarlos hasta la desesperación no dará resultado. Pueden ser ciudadanos ejemplares, pero también pueden convertirse en un ejército espoleado por el sufrimiento y el odio que termine tomando por la fuerza aquello que necesita. De cómo los tratemos en el futuro dependerá el rumbo que se vean obligados a tomar.”
John Steinbeck. Los vagabundos de la cosecha.


DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 21 de septiembre de 2007


Los Vagabundos de la Cosecha
John Steinbeck

John Steinbeck. Los vagabundos de la cosecha
“Los Vagabundos de la cosecha” es una recopilación de artículos periodísticos de John Steinbeck sobre los campesinos del medio oeste de los Estados Unidos que se vieron obligados a emigrar a California en búsqueda de trabajo empujados por una gran sequía. Los artículos fueron publicados en 1936 por The San Francisco News. A parte de servir como génesis del libro más conocido de Steinbeck, “Las uvas de la ira”, estos artículos son una muestra del periodismo valiente que hoy en día se ha dejado de hacer. Hoy, los periodistas, supeditados a los intereses de los grupos empresariales propietarios de las cabeceras de los periódicos, radios o televisiones (que suelen ser los mismos en los tres casos) y a lo políticamente correcto, se limitan a repetir las informaciones creadas en gabinetes de prensa y rara vez abandonan las redacciones para interpretar la realidad y poder explicarla con sus propias palabras. Vivimos en una época de reelaboración constante de la información partiendo de una fuente anterior que, en la mayoría de los casos, no ha vivido la noticia. Naturalmente hay algunos casos que contradicen lo que estoy diciendo, pero son menos de los que piensas.
El análisis que hace Steinbeck de las condiciones laborales y de vida de esos campesinos que vagaban por las carreteras de California en búsqueda de la subsistencia, sigue hoy vigente si cambiamos los nombres de los protagonistas y la zona geográfica en la que centramos la acción. No están tan lejos nuestras ciudades - como podríamos pensar al leer el crudo relato, la prosa acerada y certera de Steinbeck – de los campos de California en los años 30. Seguimos repitiendo los mismos errores, seguimos gastando en represión lo que deberíamos dedicar a integración y, sobretodo, seguimos tratando al emigrante – sea cual sea su origen – como inferior. No parece que quede mucho margen pero quizás todavía sea aplicable la cita final del libro de Steinbeck: “De cómo los tratemos en el futuro dependerá el rumbo que se vean obligados a tomar”.
“Los Vagabundos de la cosecha” es un documento necesario. Ha sido publicado por Libros del Asteroide, una pequeña editorial que tiene un corto pero interesante catálogo y que, entre otros aciertos, son los culpables de la recuperación de la trilogía de Deptford de Robertson Davies y de los libros de Nancy Mitford. Y aunque han acertado de pleno con la publicación de los “Vagabundos de la cosecha”, no me parece bien el precio (13’95 €) que le han puesto a esta breve recopilación de artículos. No justifica el precio ni la brillantez del texto, ni el sabio prólogo de Eduardo Jordá y ni siquiera lo hacen las impactantes fotografías de Dorothea Lange. Una mancha que no empaña un texto imprescindible que nos muestra el talento de Steinbeck como periodista.


Viernes al fin. Día que preludia un largo y festivo fin de semana y que, por esas extrañas razones del azar, para mí forma parte de él.

20 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Jueves, 20 de septiembre de 2007


Que lenta pasa la semana cuando el ocio es poco y las obligaciones muchas. Puedo contar poco de estos últimos días y hacerlo ligeramente atractivo, o simplemente legible, es un ejercicio literario de demasiado nivel. Renuncio pues a hacer un pormenorizado resumen de mi rutina laboral – sólo adornada con escasos momentos de ocio en compañía de María José – mientras espero que la situación se revierta y el ocio vuelva a protagonizar una parte importante de mi vida.

Carmen Posadas. Juego de Niños
He acabado de leer “Juego de Niños” de Carmen Posadas. Desde que leí su delicioso “Pequeñas infamias” tenía ganas de volver a encontrarme con un libro de Carmen Posadas y “Juego de Niños” ha respondido totalmente a mis expectativas. Carmen Posadas escribe muy bien y “Juego de niños” es un libro absorbente que juega con los límites entre realidad y ficción literaria, entre el pasado y el presente, entre la inocencia y la maldad. El libro de Carmen Posadas está bien construido, es emocionante, entretenido y te hace pensar – y sonreír, imaginar y buscar -. Poco más se le puede pedir a una novela.

Escucho a Micah P. Hinson mientras escribo esto. Hay que prepararse para el concierto que el viernes que viene ofrecerá en Apolo.

Por último os dejo un enlace con el artículo sobre el Restaurante Ugarit.

17 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 17 de septiembre de 2007


Hoy toca volver a trabajar después de un largo y provechoso fin de semana. No he tenido tiempo para escribir con lo que se impone un resumen de aliño.

Sábado. Decidimos disfrutar de las últimas horas de libertad ciclista (hoy lunes ha entrado en vigor la nueva normativa que criminaliza el uso de este vehículo) haciendo uso del Bicing para acercarnos al centro de la ciudad. Paseamos por el Joan Costa
Borne y por el Gótic, vemos tiendas y, en la Galería Trama disfrutamos con la exposición del mallorquín Joan Costa. Sus algas, en cuadros o en esculturas, tienen algo que fascina. No nos llevaremos ninguna a Graceland, pero ganas no faltan. Justo enfrente, en la Sala Parés, vemos una exposición de pintura joven que no resulta tan interesante.
Vuelta a Graceland. Siestas, series y paseos con Cass.
Cena (con Pablo, Jordi P., Emma, Víctor, Laura, Ramón, Iola, David y María José) en El Mundial y copas en The Black Horse y en El Nus.

Domingo. Nos levantamos tarde y cogemos el coche para subir a S’Agaro para comer con mis padres. Cass juega en el patio y pasea por el bosque, mañana tendrá agujetas. La vuelta se convierte en un pequeño infierno debido a las largas colas – ocho kilómetros – que nos encontramos en la carretera.

Artículos sobre el Kan Kan, el fuego en las fiestas de la Mercé y el Rockdelux Music Weekend.

14 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 14 de septiembre de 2007


Extraña semana. Pese a la fiesta del martes, pese a tener sólo cuatro días laborales, ha costado llegar hasta el final.
A parte del trabajo poco tengo que explicar (cierta decepción al ver “Gangs of New York” - el peor Scorsese para un material buenísimo que no supo aprovechar -, buenos momentos leyendo el “Juego de Niños” de Carmen Posadas... y poco más).

Estos días he aprovechado para explicar la nueva temporada del TNC y la sala bikini.

Le Mans. Le Mans
DISCOS VIEJOS que hace tiempo escuché (VII)
Le Mans. Le Mans


Enero de 1994, yo creía que lo mío era el rock. Por aquel entonces compraba el Ruta 66 y, siguiendo la línea editorial de la revista, renegaba de Rockdelux por ser “demasiado comerciales”, “unos pijos” y “unos vendidos que no tenían puta idea de lo que era el rock”. Mis compras en las tiendas de discos eran de - cuando más desconocidos mejor - oscuros grupos de garaje y – más oscuros todavía – combos inverosímiles que hacían variaciones ruidistas que más o menos se parecían a algún tipo de rock primitivo. Y de pronto cayó en mis manos un disco diferente y mis – creía que eran sólidos – esquemas saltaron por los aires.
Allí estaba la portada de Le Mans con esas nubes blancas en un fondo azul, y ese nombre horrible que no prometía nada bueno. Pero fue poner el disco, empezar a sonar “Un Rayo de Sol” y notar que la incertidumbre se apoderaba de mí. “Un rayo de sol” es pop luminoso y – o cosa horrible – hasta bailable. Pero, contra todo pronóstico e incluso contra mi voluntad, aquello me gustaba y continué escuchando todo el disco. Las letras hablaban de cosas cotidianas y no de gente atormentada que lloraba sus males... no entendía nada, pero seguí adelante.
Al poner la segunda cara y escuchar “H.E.L.L.O” (donde utilizaban – oh pecado - bases electrónicas y samplers) algo ya había cambiado para siempre y el pop había vuelto a mi vida. A partir de ese día y hasta su disolución como grupo, Le Mans se convirtió en uno de mis grupos de cabecera. Redescubrí a Aventuras de Kirlian (su anterior proyecto que había pasado desapercibido para mí, demasiado concentrado en encontrar la “esencia” del rock) y disfruté del concierto que – junto a La Buena Vida – dieron en la Plaza Real con motivo del Bam. Este primer disco no es el mejor de la banda (yo prefiero sus posteriores discos), pero en estas pequeñas historias musicales no quiero hablar de calidades sino de sensaciones personales, y este disco es culpable de alguno de mis actuales vicios en este campo.

Le Mans fue publicado en enero de 1994 por Elefant Records. Actualmente es posible encontrar una reedición en cd (en formato digipack).

11 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 11 de septiembre de 2007


Hoy es festivo en Catalunya y el aniversario de muchas cosas, algunas buenas (aprovecho para felicitar a Pepe y Lidu y a Albert y Esther), la mayoría malas.
Con la calma y el silencio que acompaña las primeras horas de un día festivo, me siento delante del ordenador dispuesto a escribir la crónica de estos días que, debido a la pertinaz pereza y a un exceso de actividad lúdico-infantil, se ha acumulado.

Jueves. Tras una cena – deliciosa – en el Cardamon con amigos, pierdo parte de la noche enzarzado en una bizantina discusión que nada aporta a mi vida ni a la noche. Por suerte, en compañía de Jordi P. la noche remonta fácilmente y, tras la visita al Kan Kan, cruzamos la Via Laietana para adentrarnos en los callejones del Gótic. En el Ginger primero y en el Ascensor después arreglamos el mundo que buena falta le hacía.

Viernes. El cansancio que provoca buscar sin pausa una solución para el mundo pasa factura al día siguiente. Estoy cansado pero – por suerte – la esperada resaca (ayer, para ayudarnos en el complicado trámite de arreglar el mundo, tuvimos que consumir bebidas con un moderado contenido alcohólico) no llega a consumarse.

Jornada laboral estándar.

Alejandro, nuestro sobrino, ha venido desde Castellón a pasar un par de días con nosotros. No hay agenda de actividades pero si muchas ideas. En dos días: cenaremos en el japonés de la puerta de al lado, haremos un montón de partidas con el Dirty Harry, iremos a ver “La Jungla 4.0” (que me lo hace pasar tan bien como sus predecesoras), jugaremos muchas partidas con la maquina recreativa (sobretodo al Metal Slug), nos pondremos las botas en el “Ugarit”, desayunaremos y comeremos en el patio de Graceland, pasearemos con Cass, organizaremos una sesión de cine en Graceland (con – Alejandro elige – “Las vacaciones de Mr. Bean”) y desgastaremos nuestras últimas fuerzas con una agotadora sesión de patinaje en el Skating (que no había pisado en los últimos 15 años).

Domingo noche. Alejandro ha vuelto a Castellón. Estamos agotados pero lo hemos pasado muy bien. Estar con un niño nos ha obligado a hacer cosas que hace tiempo que no hacíamos y espero que pronto se repita.

Lunes: agujetas y trabajo. ¿Se le puede pedir más a un lunes? Por suerte, la idea de que el martes es festivo y la mañana en compañía de María José me ayudan a soportar el día.

Patricia Cornwell. Causa de Muerte
He acabado de leer “Causa de muerte” de Patricia Cornwell. Pese a que, cada vez más, me parece que seguir leyendo los libros de la serie protagonizada por la doctora Kay Scarpetta es una pérdida de tiempo (el nivel no puede bajar más que en esta entrega), voy a darle otra oportunidad. Por un lado espero que la serie remonte y por otro me divierte ver lo obsoletas que pueden quedarse algunas novelas cuando se apoyan en la tecnología. Lo dicho, una oportunidad más.
También he aprovechado para escribir sobre el TNC (el Teatre Nacional de Catalunya) y sobre la Música en la Mercé.

06 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Jueves, 06 de septiembre de 2007


Mucho trabajo y poca diversión en estos días de vuelta al trabajo.

abarca vieja vs abarca nueva,el gran dilemaNo somos eternos. Las abarcas que han acompañado mis pasos durante los últimos meses me dejan durante unos días, quizá para siempre. María José intentará una recuperación que, dado su estado actual, no parece fácil. Unas nuevas y relucientes ocupan su lugar, pero a mí las que me gustan son las viejas. Son cómodas y, pese a estar sucias, mordidas por Cass y tener la suela prácticamente lisa, me gustaría que siguieran conmigo mucho tiempo más. Las nuevas algún día alcanzarán el nivel de confort que proporcionan las viejas pero entonces – la vida suele ser así de irónica - les llegará el relevo.

Un artículo sobre el Bam del 2007 y otro sobre el restaurante La Carassa han ocupado parte de mi tiempo.

03 septiembre 2007

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 03 de septiembre de 2007


Ya ha pasado el primer fin de semana de la temporada. Ha pasado volando pero nosotros somos los únicos culpables. Un maratón impresionante de la quinta temporada de “24” es también culpable de que el sofá se haya convertido en el centro de nuestras vidas este fin de semana.

Pero no todo ha sido televisión: una cena en el panyvino, un paseo por El Borne, una copa en el Kan Kan, paseos con Cass, ratos de lectura y una comida en el Bellavista también han ocupado parte de nuestro tiempo. Ha sido un buen fin de semana. Las pilas – que se habían descargado poco – vuelven a estar cargadas.

Aproveché el paseo por el Borne para hacer las fotos de El Nus que necesitaba para escribir este artículo.