31 agosto 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 30 de agosto de 2008

Vacaciones, día 29


Viernes. María José y yo estamos planificando un viaje a México (si tengo que ser sincero, el viaje lo está planificando – con mucha paciencia – Amador, pero los beneficiarios seremos nosotros). Para ambientarnos un poco (y apurar las vacaciones que ya se acaban) decidimos comer en La Coronela, un mexicano del Born. Comemos sopes, rajas, gringas con queso y puntas al chipotle pero, sobretodo, soñamos y hacemos planes compartiendo la información que vamos recopilando en revistas y guías mientras preparamos el viaje.

Casi puerta con puerta con La Coronela, estaba el Panyvino. Y digo estaba porque nos hemos llevado la desagradable sorpresa de encontrarlo cerrado. En él hemos pasado muchos momentos agradables. En una de sus mesas empezamos a soñar con la posibilidad de adquirir Graceland y allí nos reencontramos con amigos y hemos hecho cenas de grupo y románticas cenas de pareja. Lo echaremos mucho de menos. Huérfanos de restaurante de cabecera nos dejamos adoptar por cualquiera que cumpla nuestros requisitos: acogedor, trato amable, buena comida y precio asequible.

Después de la copiosa comida se impone una siesta para recuperar fuerzas y que nos lleva, casi, a la hora de cenar.

Teníamos que celebrar mi cumpleaños con la familia y algunos de los sitios que habíamos elegido estaban todavía cerrados por vacaciones. Al final acabamos en el Ugarit y, pese a que todo está muy bueno, no resulta el sitio ideal (demasiado ruido para estar a gusto). Pese a todo lo pasamos bien y, de regalo, me llevo un fabuloso fin de semana en un sensacional hotel de montaña.
Ahora que María José y yo volvemos al trabajo son mi familia los que empiezan vacaciones. Eli y Cesc se van a Nueva York y mis padres a S’Agaró. Me alegro por todos ellos, pero la envidia me corroe.

Mi mama está en america y ha conocido a Bufalo BillDe nuevo en casa, y antes de ir a dormir, dejo el libro que estoy leyendo y devoro “Mi mamá está en América y ha conocido a Buffalo Bill” de Jean Renaud y Émile Bravo (me lo ha dejado María José que si no lo digo me pega bronca). Un delicioso cómic sobre la pérdida de la inocencia que está construido a partir de pequeños detalles que a todos nos traerán recuerdos de la infancia. Pese a su tono triste, se lee con una sonrisa en los labios y se disfruta mucho.

29 agosto 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 29 de agosto de 2008

Vacaciones, días 26, 27 y 28


Es viernes y eso no provoca especial alegría, que grandes son las vacaciones.
De todas maneras estar sin María José no es lo mismo y echo de menos sus risas, sus abrazos y hacer planes con ella.

El ordenador vuelve a ocupar la mayoría de mis horas ya que tengo mucho “trabajo” atrasado. Queda tiempo para cenas con amigos (Mariona que nos ha recogido el correo durante las últimas semanas vino a cenar al patio de Graceland), cervecitas a media mañana con Jordi R. y una visita a la exposición “Barraques, la ciutat informal” en el Museu d’Història de Barcelona.

Pese a que la exposición no es todo lo exhaustiva que me gustaría (no hay imágenes de televisión y muy pocos periódicos para contextualizar los últimos años del barraquismo) no deja de ser curioso que el ayuntamiento que relegó al olvido un fenómeno que forma parte de la historia del desarrollo de nuestra ciudad, sea quien está detrás de esta exposición. No se puede entender la actual Barcelona sin el fenómeno del barraquismo y lo que supuso en unos años de crecimiento y expansión de Barcelona. De él nacieron algunos barrios populares y sus precarias soluciones aún generan problemas de marginación y urbanismo hoy en día.
El fenómeno a algunos puede parecerles muy lejano pero yo – entonces trabajaba en otra empresa – visité por motivos laborales las últimas barracas de Can Tunis (y las olimpiadas de Barcelona 92 ya eran entonces un lejano recuerdo en el retrovisor). Lo que vi no está demasiado lejos de lo que la exposición cuenta.
Un reportaje de testimonios es uno de los elementos más interesantes de la exposición pero de nuevo se echan de menos más imágenes. Lástima porque la exposición podía haber sido mucho más interesante de lo que es.
Es imprescindible colocar el barraquismo en la historia oficial de la ciudad y esta exposición es un primer paso, pequeño y algo tímido, en ese camino.

27 agosto 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 26 de agosto de 2008

Vacaciones. Días 22, 23, 24 y 25


De vuelta en Barcelona tras 20 días en el que, sin lugar a dudas es, mi paraíso particular. Paraíso porque, a parte de sus virtudes indudables, le añado los beneficios de la memoria y de los buenos recuerdos. Cada rincón, aunque afectado por una evolución no siempre agradable ni sostenible, tiene un recuerdo, una historia, un momento brillante, el reflejo de unos tiempos no necesariamente mejores pero que calaron hondo en mí.
Hacía mucho tiempo que no podía disfrutar con tanta intensidad de S’Agaró y recuperar el veraneo “old style” ha sido una gozada.

Barcelona se me antoja gris – el tiempo que nos ha acompañado estos dos días supongo que ayuda a esta sensación -, apagada. Echo de menos la luz, el olor a mar y a pinos, la brisa en la playa y la ausencia de ruido constante.

Tendría que haber escrito sobre los últimos días en S’Agaró (una agradable comida en el Restaurant Les Gavarres con Xavi y Nuria, una cena en casa con Jordi R. y Nuria, una mañana de sol en el Nautic (972320663) de Sant Feliu -, la vuelta a Graceland y el intento de volver a una cierta rutina urbana sin traumas), pero no lo haré.
Aún quedan días de vacaciones y pienso disfrutar hasta el último minuto.

24 agosto 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 22 de agosto de 2008

Vacaciones, días 20 y 21


Jueves. Sólo faltó en mi cumpleaños una tradición veraniega que quiero cumplir. Así que recordando otros cumpleaños (en los que mis padres me llevaban al Mini golf, al Magic Park o al Tramontana) María José me lleva al Magic Park (que sigue siendo un paraíso en el que malgastar capitales excedentes) donde juego una partida al Spiderman de Stern (fácil y muy jugable, una gran máquina que no me importaría tener).

Aprovechando que estamos en Platja d’Aro cambio una de las dos camisetas que me regalaron (la casualidad puso en mis manos dos camisetas iguales, compradas en la misma tienda entre más de 50 modelos distintos).

Por la tarde mis tíos vienen a traernos unas bolsas, tomamos algo con ellos y, después de un paseo por Platja d’Aro con Cass, vamos hasta su casa para recoger unas bolsas con premios para Cass. Marta acaba de empezar sus vacaciones y nos convencen para cenar.

Viernes. Nublado, incluso caen alguna gotas. Aprovechamos para reducir el caos que nos rodea y para escribir esto que estáis leyendo.

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 20 de agosto de 2008

Vacaciones, día 19


Atención: el post de hoy, como algunas películas modernas de difícil comprensión, está hecho con flashbacks.

Hoy hace 40 años: yo no quería salir, pero al final deciden sacarme. Mi madre respira aliviada, no sabe que lo peor está por venir.

Veranos entre 1969 y 1984 paso mis veranos en S’Agaro, muchos años, mis padres organizan unas fiestas estupendas en el patio de los apartamentos. Celebro mis fiesta de cumpleaños en S'Agaro
cumpleaños rodeado de amigos (en la foto – creo que es del 76 – mi abuelo sirve Fanta de limón – a Tito, a Paqui, a Carlos y a mí – bajo la atenta mirada de mi madre – que debía ser más joven que yo ahora -. En la foto también veo a Marta, a Albert (girado hacia la cámara) y a Jordi (de espaldas).

Veranos entre 1969 y 1984. A parte de celebrar cumpleaños, en compañía de Albert, de Tito y de algún compinche más, hacemos partidas eternas de Risk en el balcón del apartamento.

Verano de 1981. Mi padre se hace socio del Club de la urbanización (poco más que dos pistas de tenis en las que me pasaré los veranos a partir de ahora).

Veranos entre 1981 y ahora. En el Club hago nuevos amigos.

Navidades de 1996. Mi empresa, en vez de regalarnos el lote navideño, nos obsequia con una triste mochila de lona.

De 1997 a 2008: Contra todo pronóstico la roñosa mochila se convierte en imprescindible para mí. Un día su estado es insostenible y – tras buscar una igual (tarea imposible) – María José me regala una nueva. En junio de 2008 la mochila substituta dice adiós.

Junio de 2008. María José me regala – anticipadamente – una entrada para ver a Tom Waits con motivo de mí – futuro – 40 cumpleaños.

15 de Julio de 2008. Disfruto del Glitter and doom tour de Tom Waits.

Aquí se acaban los flashbacks (podéis recurrir a ellos si no entendéis algo, su lectura no obstante no garantiza la comprensión.)

Me despierto y, joder, tengo cuarenta años. Tendría que ser un señor responsable y así lo dicen las canas de las que está hecha mi barba y que ocupan cada vez más superficie de mí – escaso – pelo. Sin embargo me siento como un chaval.

Ayer – ya era casi hoy – María José completó su regalo de cumpleaños con una mochila negra que viene a substituir a mi maltrecha mochila.

Desayunamos, como todos estos días de vacaciones, en el balcón mientras vemos cualquier competición olímpica y después salimos con destino a la playa.

Es muy pronto y en La Conca hay muy poca gente. Para llevarle la contraria al dicho (“de los cuarenta para arriba no te mojes la barriga”) me baño pese a que el día esta algo nublado (después se arreglará).

Visita a la biblioteca para conectarme (que difícil parece ahora vivir sin ADSL) mientras empiezo a recibir llamadas de felicitación (gracias a todos). A la hora de comer nos acercamos a la playa de Sant Pol y comemos una paella en el Voramar (Camí fondo, 14 Platja de Sant Pol. Tel 972 321047), como llegamos pronto estamos muy a gusto (la paella muy buena y el patio del restaurante muy agradable).

Hace muchos años, con motivo de mis cumpleaños, mis padres solían organizar una merendola para mis amigos en el patio de los apartamentos. María José ha querido regalarme este año una – que por motivos logísticos hemos trasladado al Club – y se pone a hacer bocadillos mientras yo descanso. De golpe nos sacude la noticia del accidente aéreo de Madrid y nos quedamos sobrecogidos.

Empieza a declinar el día cuando María José, con la ayuda de Neus y Andreu, da los últimos retoques a las mesas llenas de bocadillos y cosas para picar. Y pronto llegan nuestros amigos: Anna y Jaume con Martí, David J. y Montse con Oriol, David F. y Nuria, Esteve y Martina, Iván y Mani, Marta, Albert y Esther. De golpe la reunión se convierte en un reflejo – algo otoñal – de aquellos encuentros de hace unos años cuando este Club era nuestra casa. Vuelven las bromas como si el tiempo no hubiera pasado.

María José se ha ocupado de todo y de golpe aparece un pastel gigante con un 40 encima. Soplo las velas y recibo regalos. Todos son fantásticos (camisetas, útiles de cocina, aceites...) pero, sobretodo, me hace muchísima ilusión el regalo de Albert y Esther.

Albert, en recuerdo de esas eternas partidas al Risk que ocuparon las tardes lluviosas de nuestra infancia aquí, me regala un fabuloso Risk Gramoia Edición 40 aniversario. Un regalo hecho a mano, con ilusión, mucha imaginación y ese punto de locura que convierte a Albert en alguien tan especial.
Risk Gramoia edición 40 aniversarioEn el Risk no falta nada: un mapa de la urbanización (La Gramoia) con los diferentes territorios con nombres llenos de significado para nosotros, las cartas con bromas privadas, las fichas y los dados.
No sólo me gusta a mí. A todos nos encanta ya que es un regalo lleno de recuerdos y nostalgias compartidas. Juntos lo revisamos y nos reímos al descubrir las bromas ocultas tras una frase que resume mucho más de lo que parecería a un profano.
Gracies Albert.

Martí juega con Cass que, poco a poco, acaba con los globos. Después del pastel seguimos hablando y disfrutando de la compañía. Me ha gustado mucho la fiesta, la sorpresa del pastel y los regalos. Pero estar todos juntos otra vez es el mejor de los regalos. Gracias.

20 agosto 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 19 de agosto de 2008

Vacaciones, días 17 y 18.


Escribo el último diario antes de llegar a la cuarentena. La próxima crónica estará escrita por un hombre mayor y responsable, hoy todavía disfruto de la juventud.

Durante los últimos días – hasta ayer después de comer – hemos hecho las mismas actividades que todos los días – incluso menos – al ritmo que marcan dos niños de 11 (casi 12) y 5 (casi 6) años... y la verdad es que es mucho más cansado. Padres del mundo: agradezco vuestro esfuerzo y os compadezco.
Ahora, un poco tristes por su partida, volvemos a nuestra rutina reposada de siestas, playa y actividades veraniegas (entendiendo como tal, cualquier actividad – sea cual sea su naturaleza – emprendida con espíritu vacacional). Ahora vuelvo al ritmo reposado para saborear mis últimas horas como treintañero.

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 17 de agosto de 2008

Vacaciones, día 16.


Nueva jornada vacacional que, al estar con niños y hacer otro tipo de actividades, me recuerda a mis vacaciones de hace unos años. Hoy toca ir por la mañana al club cargados con pelotas (de fútbol, de básquet, de tenis...), raquetas, patines, patinetes y Cass. Cass corre hasta que le sangran las patas y nosotros paramos mucho antes.

Después volvemos a casa y los niños bañan a Cass en el patio mientras los mayores nos lo miramos sentados en cómodas tumbonas.

Por la noche, después de la playa y de la ducha, bajamos caminando hasta el Pi de Sant Pol para una nueva cena de verano al aire libre. Al volver a casa aún hay tiempo para una partida de cartas antes de montar el zafarrancho para ir a dormir.

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 16 de agosto de 2008

Vacaciones, días 14 y 15


Sin reloj y con un calendario al que apenas prestamos atención, sigue la confusión de días y horas.

Ayer, y después de una agradable e improvisada reunión en casa de Neus y Andreu, María José y yo nos fuimos a Sant Feliu para pasear y buscar un restaurante para cenar. Después de dar un agradable paseo y descartar varias opciones, acabamos en el Acuario, un clásico al que no había prestado atención hasta ahora.
El Acuario (Passeig dels Guixols, 30 Sant Feliu de Guixols. Tel. 972324529) está al final del paseo y tiene una tranquila terracita que, en verano, resulta muy agradable. No hay vistas pero la tranquilidad es total, la separación entre mesas la correcta y el entorno es muy acogedor.
Pedimos unos calamares a la andaluza para picar (excelentes) y después nos decantamos por el menú. De primero María José eligió mejillones de roca (muy buenos) y yo un “timbal de bacallà” (una muy buena “esqueixada” de bacalao). De segundo los dos nos decidimos por un arroz de marisco a la cazuela (uno de los mejores arroces caldosos que hemos probado). De postre – después del arroz sólo llegué yo – mató con miel.
Con bebidas (cerveza, agua y un Nekeas blanco) y café, 86 €, por lo que hemos comido buena relación calidad – precio. Ya tenemos un restaurante más en nuestra siempre creciente lista de posibilidades.

Hoy llegan Lidu, Jose, Alejandro y Joana. Nos levantamos pronto y esperamos que lleguen después de un largo viaje (desde Castellón son muchos kilómetros). Playa con niños (mucho más cansado de lo habitual), comida familiar y siesta monumental. Por la tarde toca paseo por el Camí de Ronda hasta la Conca, cena en casa (bikinis hechos en el horno) y partida de cartas.

DIARIO DE UN OCIOSO
Jueves, 14 de agosto de 2008

Vacaciones, días 11, 12 y 13


Qué rápido se acostumbra uno a la inactividad. Los días se confunden y cuando me siento delante del ordenador para escribir estas crónicas vacacionales tengo que hacer un verdadero esfuerzo para recordar y situar las – pocas – actividades en un día y una hora concreta.

Cuando en la crónica se acumulan, como hoy, varios días, la cosa se complica todavía más. La repetición de actividades – playas, paseos, siestas, lecturas... – provocan este estado de confusión típica del veraneante.

Así pues, y dado que hacer un detalle pormenorizado de nuestro día a día es casi imposible, voy a destacar lo poco que se sale del esquema habitual.

Un día de estos (no se cual, no soy adivino) fuimos al cine para ver la prescindible pero divertida La Momia 3 (malísima pero lo pasamos bien viéndola).
Una comida en un japonés de Playa de Aro (el peor japonés al que he tenido la desgracia de acudir), el inicio del campeonato de verano (de momento voy perdiendo pero remontaré) y largos paseos por Sant Feliu y por S’Agaro han completado nuestros días.

13 agosto 2008

“La cuestión es que la pereza está mal vista... Pues para empezar porque desde siempre ha recibido la oposición de la religión católica, que la califica como el séptimo de los pecados capitales. A diferencia del tiempo que dedicamos a las actividades que nos apetecen en los ratos libres, la pereza es la falta de motivación y de actividad. Es la relajación de la disciplina, esa disciplina que tanto ha intentado inculcar algunas religiones y que también se premia en las sociedades capitalistas”
Margarita Puig. La Pereza que Conviene. Suplemento “Es” de La Vanguardia 9/08/2008

“En nuestra sociedad sólo se aceptan tres actitudes: trabajar, producir y consumir. En este esquema cerrado no está bien visto no hacer nada”
Santiago García Quintana. Pequeña Historia del Ocio


DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 11 de agosto de 2008


Vacaciones, día 10.

El día se levanta nublado y eso nos aleja de nuestra rutina habitual. Aprovechamos para reaprovisionar la nevera y para leer. Acabo “Imperium” de Robert Harris, un Robert Harris. Imperiumtrepidante thriller político ambientado en los últimos años de la república romana y con Cicerón como protagonista. Robert Harris convierte el juego político en algo sumamente atractivo, en un ejercicio de política ficción basado en los hechos y documentos históricos.

Por la noche, y en Calella, nos encontramos con Alberto, Consol y Clara. Paseamos por el camino de Ronda hasta Llafranc y cenamos en una pizzeria. Aprovechamos para ponernos al día tras un año en el que sólo hemos compartido alguna llamada y algún mail esquivo. Volvemos paseando por el mismo camino de ronda mientras Clara empieza a dormirse. Una cervecita en su balcón aprovechando la brisa que de madrugada refresca el pueblo pone fin a la noche. Es hora de volver a casa.

“El hombre se mueve en una continua batalla interna entre la obligación y la pereza. Constantemente se encuentra con factores culturales, religiosos o éticos que le dictan que sea activo, que se mueva, que produzca. Pero por otra parte existe una pulsión humana que consiste en no pegar golpe. Los biólogos explican que las personas sólo se ponen en marcha cuando tienen un motivo para hacerlo. De hecho hay mustras evidentes que la actividad está más vinculada a la cultura y a la socialización, mientras que la pereza pertenece a nuestro instinto animal.”
Margarita Puig. La Pereza que Conviene. Suplemento “Es” de La Vanguardia 9/08/2008


DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 10 de agosto de 2008

Vacaciones, día 9


Encuentro un par de carretes perdidos en dos viejas cámaras analógicas y los llevamos a la tienda para que revelen los carretes y, en vez de copias en papel, me hagan un cd. Recupero la magia del misterio que tenía antes la fotografía ¿Cómo habrán quedado las fotos? Y en este caso de carretes abandonados, ¿De qué son las fotos?
Cass hace más de un año

El primer carrete es un monográfico con fotos de Cass (de hace más de un año, la última vez que cogimos la cámara).
El segundo, de la máquina sumergible, tiene alguna foto curiosa del fondo del mar (también son del año pasado).
Me ha gustado recuperar esa incertidumbre que la fotografía digital ha arrasado. El placer que proporciona ver por primera vez una foto hecha hace tiempo y su fuerza evocadora que te hace revivir el momento. La fotografía digital tiene sus ventajas pero en el camino hemos dejado sensaciones y vivencias. Nada es perfecto.

“ ¿Qúe has hecho en vacaciones? Nada especial...Antes de la sociedad de consumo con una interminable oferta de actividades de ocio, nada quería decir pasarse las vacaciones tumbado tomando el sol, leyendo, escuchando música, un aperitivo, una siesta, un paseo, una cena con charla al fresco... Esto se antoja hoy a algunos desaprovechar el valioso tiempo.”
Marta Ricart. Aprender a no hacer nada. “La Vanguardia” 09 de agosto de 2008.

“El ocio nunca debe convertirse en una obligación y no es necesario ocupar al completo nuestro tiempo de ocio con actividades de todo tipo. Al contrario de lo que pueda parecer, la falta de actividades en las que emplear esa joya que es nuestro tiempo de ocio, no quiere decir que estemos malgastando el tiempo. Las pequeñas actividades diarias – y las inactividades diarias– adquieren un nuevo valor en un contexto distinto”
Santiago García Quintana. Pequeña historia del Ocio.


DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 9 de agosto de 2008

Vacaciones, día 8


La cama se va haciendo a nosotros o nosotros a la cama. Cada día dormimos un poco mejor, lo que no quiere decir que todavía durmamos bien. Quizás el último día.

Me levanto pronto, me visto escuetamente con el uniforme del veraneante (un bañador y una camiseta – hoy con mensaje -). Cojo la correa y, con los ojos todavía pegados, abro la puerta para que Cass salga corriendo. Intento, como cada día, seguirla sin sufrir percances por las escaleras que me separan de la calle y llego, a trancas y barrancas, a tiempo para que no se haga pipi en la misma puerta – y antes de salir a la calle-.

Hace fresco y está nublado. Paseo hasta el cruce donde compro el pan, y unos cruasanes, en la Ibicenca. Los periódicos los compraré en otro sitio ya que no tengo ganas de aguantar el maltrato y las malas caras habituales del único local que vende prensa en el cruce.

Vuelta a casa, desayuno en el balcón con María José que lo ha preparado todo y primeras imágenes de los Juegos Olímpicos de Pekin (ciclismo en carretera). Ayer vimos un poco de la espectacular ceremonia inaugural (sin duda – y aunque le pese a Lluís Bassat que hoy escribe en El País – la mejor de la historia) y a partir de hoy sus imágenes nos acompañarán a lo largo del día.

Cambio de playa – hoy toca Punta Prima – pero misma rutina (llegamos pronto, plantamos la toalla frente al mar, intentamos leer – hoy el periódico, tarea imposible -, nos bañamos y nos secamos al sol).

En casa aperitivo, siesta y descanso. Cenamos con amigos (Albert, Ester, Núria, Marta, Neus, Andreu, Carles y Montse) en el Pi de Sant Pol .

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 08 de agosto de 2008


Vacaciones, días 5, 6 y 7

Los días se suceden con parecidos esquemas. Han pasado tres desde mi última crónica pero podían haber sido más, o menos. La mente del veraneante se acostumbre a la atemporalidad y, al contrario de lo que ocurre durante el resto del año, es el tiempo el que fluye a nuestro alrededor sin que nosotros nos movamos al compás que marca.

Playa (visitas matutinas a La Conca donde, a parte de nadar y esquivar pequeñas medusas, intento – con el éxito habitual que este tipo de titánicas tareas conlleva – leer algo más de dos páginas seguidas), largos paseos con Cass (por la montaña, por la urbanización, con correa y sin ella), cenas con amigos (en esta ocasión con David y Iola – y Ona y Min – en el Pi de Sant Pol), siestas (algunas del carnero, otras – más canónicas – después de comer) y buenos ratos de lectura (en Sant Feliu, en el patio de los apartamentos, en la cama...).

Hoy se ha levantado nublado y nos hemos saltado el programa de fiestas habitual paraOliafur Eliasson acercarnos a Girona. Paseo por el barrio viejo y largo rato de lectura en la terraza de un bar. Hemos venido con Cass y mientras uno se queda con ella el otro aprovecha para, en la Fundació Caixa Girona, visitar la exposición de Olafur Eiasson (es la continuación de la exposición que todavía puede visitarse en la Fundació Miró). Pese a que hay alguna obra notable salgo con la misma sensación de estar en la frontera entre el arte y el museo de la ciencia. Interesante, curioso... poco más.
Una vez los dos hemos visitado la exposición (y una de gravados de Miró en la misma sala de exposiciones) seguimos con nuestros paseos por la ciudad y con otra parada en una agradable terracita (de las que Girona parece estar plagada).
Fred Vargas. El hombre de los círculos azules
He acabado “El hombre de los círculos azules” de Fred Vargas. Un desfile de personajes curiosos, conversaciones imposibles e elaboradas intrigas que me ha divertido. Seguiré leyendo a Fred Vargas.

06 agosto 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 05 de agosto de 2008

Vacaciones, día 4


Las vacaciones siguen con su ritmo tranquilo y placentero. Las actividades se suceden con pocas diferencias con el día anterior. No importa lo que hacemos sino como lo hacemos. No hay prisas, la agenda se limita a agradables compromisos sociales y una pequeña medusa flotando en el agua no puede estropear una fabulosa mañana de playa.

He acabado “La perfección del tiro” de Mathias Enard. No es un libro de vacaciones pero es una gran novela, dura, precisa y acerada como el cañón de la escopeta que el protagonista utiliza para hacer su trabajo: elegir un objetivo, disparar y matar. Novela descorazonadora sobre el amor o más bien sobre su ausencia. Poco reconfortante, poco veraniega, brillante.

Empiezo a descubrir a Fred Vargas mientras me preparo para volver a casa de Albert y Ester que esta vez han preparado una paella.

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 04 de agosto de 2008

Vacaciones, día 3


La falta de una conexión decente y la ausencia de redes inalámbricas a mi alrededor (he visto aparecer una pero ha desaparecido poco después, debía ser una wifi fugaz) hace que esté acumulando crónicas sin publicar y que la actualización del diario se produzca de golpe.
Primer día de playa después del habitual paseo con Cass. En la playa hay poca gente todavía – es pronto – y podemos poner las toallas junto al mar. Baños y lectura, la sensación de vacaciones aumenta.
A mediodía queremos aumentar la sensación de vacaciones comiendo fuera. El Toc de Sol (Ctra. de S’Agaró, 25 Castell D’Aro Tel. 972 82 50 64) es un restaurante al que fuimos hace un par de años cuando acababan de abrir. Nos Restaurant Toc de Sol. Castell d'Aro
gustó y tenemos curiosidad por ver su evolución. Aprovecharemos que a mediodía tienen un atractivo menú por 15 euros (bebidas aparte). Nos traen un entrante dulce (muy bueno, aunque es curioso empezar con lo que podría ser un postre) hecho con manzana. Aunque todos los platos tienen buena pinta me decido por un tartar de atún (delicioso, acompañado de aguacate de almejas frescas que me acercan todavía más el mar), por un Ongle de Buey (muy bueno acompañado de un pastel de verduras) y por el biscuit glacé (delicioso).
La cocina sigue siendo muy buena, las cantidades igual de generosas que en nuestra primera visita y la atención a los detalles muy grande (todos los platos vienen con pequeños y sabrosos detalles que los engrandecen). El servicio sigue siendo el punto débil del restaurante. Si en nuestra primera visita pecó de poco profesional en esta ocasión nos han tratado con cierta suficiencia (nuestra indumentaria veraniega sin duda ha influenciado) y si hacia el final de la comida el camarero ha acabado siendo atento, hubiéramos agradecido esa amabilidad cuando hemos pedido explicaciones a la hora de elegir los platos. Volveremos y lo recomendaremos ya que sigue siendo una buena opción en la zona.

Paseos, siestas, charlas en el Club con amigos, ratos de lectura y Dexter ocupan el resto del día.

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 03 de agosto de 2008

Vacaciones, día 2


La cama hace ruido cada vez que uno de los dos se mueve, Cass está inquieta y no deja de dar vueltas por el apartamento (que es muy pequeño, lo que hace que siempre esté dando vueltas a nuestro alrededor), el gallo del vecino confunde el alba con los faros de cualquier coche que pasa por la carretera y no deja de cantar, hace calor... como suele ser habitual aquí – el paraíso tiene sus limitaciones – no dormimos demasiado bien. Es por eso que es todavía pronto cuando decido salir con Cass a dar un paseo. Aprovecho para comprar el pan (una deliciosa rueda de cereales, panecillos y cruasanes) en La Ibicenca.
Desayunamos en el balcón, vamos a pasear con Cass y empezamos a disfrutar de la rutina vacacional hecha con pequeños placeres que, por insignificantes, no merecen ser consignados (ni siquiera aquí). Nuestras vacaciones empiezan a brillar con luz propia.

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 02 de agosto de 2008


Vacaciones, Día 1

Todo un año esperando para volver a encabezar mis crónicas con esta deliciosa palabra: vacaciones.

Y empezamos nuestras vacaciones (María José también las empieza hoy) adecentando un poco nuestra casa y preparando el equipaje. Al atardecer, después de comer un bocadillo en el bar de la plaza y de una siesta, María José en la moto y Cass y yo en el coche salimos con destino a S’Agaro.
Pese a que tomamos caminos distintos, llegamos con minutos de diferencia. Descargamos el coche – lleno hasta límites impensables – y empezamos a disfrutar de nuestra estancia aquí. Albert, Ester y Marta nos esperan en su casa con una mesa rodeada de antorchas en el jardín. Jordi R3 también se apunta y, aunque ya ha cenado, nos acompaña.
Estar de nuevo con ellos, en S’Agaro, me recuerda a otras noches de verano – de hace muchos años – donde nuestra única preocupación era encontrar actividades en las que emplear la generosa ración de tiempo que se nos había otorgado. Mirándolos ahora - todos pasamos largamente de la treintena – veo todavía los niños con los que jugaba, día tras día, durante muchos agostos. Agostos que son sinónimo de felicidad y que están llenos de grandes recuerdos.

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 01 de agosto de 2008


Y llega por fin el momento. Me despido de los compañeros y empiezo a disfrutar de las vacaciones pese a que todavía no lo parecen. El año pasado inauguramos nuestras vacaciones en un restaurante de nuestro pueblo y hemos decidido convertirlo en tradición. El escogido hoy es Ca Les Noies (Rossend Arús, 2 l’Hospitalet de Llobregat. Tel. 933383010). Llegamos pronto y damos un paseo por el barrio descubriendo rincones inéditos para nosotros que nos presentan una ciudad diferente a la que conocemos (la calle del Xipreret es una pequeña delicia en medio de la segunda ciudad en número de habitantes de Catalunya). En la terraza del restaurante hacemos un pequeño aperitivo con un Carpaccio de Idiazabal con sobrasada y miel acompañado por una Voll Damm. granizado de tomate raf con espuma de anchoas
Ya en el restaurante nos sentamos en una mesa del segundo piso con unas vistas estupendas a la plaza. Al sentarnos nos sirven un chupito de gazpacho muy bueno. El pan (que nos cobrarán), recién hecho y con pipas también está impresionante. De primero me decido por un granizado de tomate raff con espuma de anchoas (muy conseguido el juego de texturas y sabores pero su tamaño resulta excesivo ya que el frío del granizado acaba saturando un poco. Por suerte María José acude en mi ayuda y con un poco de provolone me recupera y me permite continuar disfrutando de mi plato). De segundo Atún macerado con crujiente de sésamo (delicioso, bien marcado y con el interior rosado y tierno). Mi tenedor se lanza a por el rissoto de marisco de María José (está buenísimo, el mejor que he probado nunca) y no puedo evitar repetir más de una cucharada. Sigo bebiendo cerveza y renunciamos a los postres ya que – como hoy empiezan las vacaciones – no tienen los que más me apetecen (es el único punto negro en una cena perfecta). Seguramente volveremos ya que nos han quedado muchos platos por probar. La cena, con cafés y el aperitivo de la terraza incluido, nos sale a 34 € por persona, más que correcto por lo bien que hemos cenado.

Después, ya en el barrio, damos un paseo con Cass.

01 agosto 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 01 de agosto de 2008


Por fin es viernes. Pero hoy no es un viernes cualquiera, hoy es el VIERNES. La madre de todos los viernes, el último día de trabajo antes de las vacaciones veraniegas, el inicio de una nueva vida, omega del sufrimiento sin sentido, alfa de un periodo donde el ocio reina y todos intentamos ser más felices. Pero para llegar a ese momento en el que los cohetes estallan llenando de color nuestra gris vida laboral, tengo que cruzar una última – y no por ello menos ardua – jornada laboral.

Los últimos días de la larga semana antes de las vacaciones (tradicionalmente, la más larga del año) han sido suavizados por las cenas y los desayunos en el patio de Graceland. Cenas a la luz de las velas y desayunos con la radio bajita para molestar lo menos posible a los vecinos. El martes rompimos nuestra rutina y nos acercamos al exilio vacacional de Yoli y Rafa donde – a pesar de perros y niños – conseguimos cenar.

Maruja Torres - mujer en guerra
Mi padre – que, en una faceta nueva y deliciosa, me regala libros cada vez que me ve – me regaló “Mujer en Guerra” de Maruja Torres. Me costó un poco entrar – no creo que sea un libro redondo, por el contrario me parece pobremente estructurado – pero al final me ha gustado. “Mujer en Guerra” es un libro de memorias pero también es – y es lo que más me ha interesado – una profunda reflexión sobre la profesión periodística. Comparto parte de sus conclusiones, de su pesimista visión de la actual situación del periodismo y no estoy de acuerdo con otras. Nuestros puntos de vista y vivencias son distintas y eso nos lleva, en ocasiones, a conclusiones diversas. Pero el libro de Maruja Torres es un buen túnel del tiempo para analizar la evolución del periodismo en nuestro país.

Pleasant Dreams - Podría ser hoy
El disco que más ha sonado últimamente en casa (de hecho ha estado sonando mientras escribía esto) es “Podría ser hoy” de los castellonenses Pleasant Dreams. Pleasant Dreams son un grupo castellonense (de un pueblo que se llama Xilxes) que con “Podría ser hoy” presentan su primer disco.
Y no podían haber arrancado mejor. El primer disco de Pleasant Dreams, producido por Paco Loco, es un delicioso paseo de pop intimista, lleno de nostalgias y de luz. Si te gustan La Buena Vida o Belle & Sebastian, Pleasant Dreams te van a gustar. Yo disfruto con los estribillos brillantes de Camino de vuelta, con ese aire nostálgico de El chico que anda triste o con la delicadeza de Potser (cantada en catalán).

Doctor Divago . Las canciones del año que viene
Y sin movernos de valencia, también he estado escuchando otro sensacional disco de pop. Tengo debilidad por ellos y, consciente de eso, Manolo Bertran, tuvo a bien hacerme llegar el último disco de Doctor Divago. “Las canciones del año que viene” es, como todos los discos del grupo, una impresionante colección de canciones intemporales.
Nos hacemos mayores y las letras de Manolo – tan grandes como siempre - reflexionan cada vea más sobre eso. Son miradas hacia atrás sin ira y con ese punto dulce que siempre da la nostalgia por unos tiempos que no fueron ni mejores ni peores.

“Ya suenan en mi mente
las canciones del año que viene,
los éxitos venideros,
temas de verano y de invierno
que me están enloqueciendo”.

Hoy, por fin es viernes, por fin es EL VIERNES.