DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 29 de mayo de 2009
Miércoles. Vuelvo a casa una hora antes y, por el camino, me cruzo con muchísima gente vestida con la camiseta del Barça. Todos van a disfrutar de lo mismo - hoy es un día especial y nadie se lo quiere perder – pero van en todas las direcciones: hacia bares, casas de amigos, pantallas gigantes o fiestas populares.
Cuando llego a casa, Jordi P ya está delante de la pantalla y el partido a punto de empezar. María José nos deja en el horno las pizzas que nos ha preparado y se va con Mariona a cenar sin fútbol en el japonés mientras nosotros empezamos a disfrutar de una nueva exhibición de este equipo inmenso que se ha convertido en el mejor del mundo. Esto es fútbol, y que sea por mucho tiempo.
Tras el partido toca disfrutar del momento y reflexionar sobre todo lo que hemos vivido – y disfrutado – este año. Lo hacemos devorando programas deportivos hasta que salimos a hacer una cerveza en un bar cercano.
Jueves. Resaca. De triunfo deportivo de mi equipo y cabezona por la cerveza ingerida ( por la que hicimos en el bar... y todas las anteriores).
Por la tarde empieza el Primavera Sound. Veracruz, Cuzo, La Bien Querida, Spectrum, The Vaselines, Lightning Bolt, Joe Crepúsculo y Los Destructores, Yo la Tengo... pese a que lo paso bien tengo que trabajar y no disfruto de ningún concierto entero. Mañana por la noche me desquitaré.
Como el concierto de La Bien Querida ha sido algo decepcionante (ha tenido que luchar contra una sonorización deficiente y con problemas en los monitores), me desquito pasándome por el Stand de Elefant Records y regalándome “Romancero”. El disco si que suena maravillosamente y pone banda sonora a esta mañana.
Hoy, por fin, es viernes. Hay que disfrutar de los tres días de fiesta que tenemos por delante.
29 mayo 2009
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario