19 junio 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 19 de junio de 2011

Sábado. Sónar 2011. Por la tarde mezclo una generosa dosis de Apparat con el ritmo africano de Shangaan Electro. Finalmente le añado unas gotas de Downliners Sekt. El resultado no puede ser más agradable.

Cena en casa, series (segunda temporada de “The Good Wife”) y vuelta al Sónar para disfrutar de las últimas horas de la edición de este año.

Ya en la entrada se intuye que el recinto hoy estará muy lleno. Cerveza en mano me encuentro con Jordi P. frente al escenario donde Janelle Monae ofrecerá el mejor de los conciertos del Sónar de este año. Esto aún no lo sé. Lo descubriré en unos minutos. Mientras hacemos balance de lo que hemos visto y repasamos el horario de hoy, disfrutamos del ambiente y de una noche con la temperatura ideal. Y arranca el concierto. Presentación espectacular, primer tema demoledor e impactante fiesta durante poco más de una hora. Pop, funk y rythm & blues... puesta en escena impresionante, muchísimos músicos en escena... Monae es capaz de emocionar con una sensacional version del Smile de Chaplin y después reventar la pista con una descarga animal de ritmo... brutal.

No hay tiempo para disfrutar del éxito. Llegamos al SonarClub – el escenario principal que hoy está más lleno que nunca – cuando arranca la actuaión de Underworld. Efectivos e impactantes, consiguen hacer bailar hasta a el más reticente. Antes de irnos a por el que será el último concierto – para nosotros – del festival, nos pasamos por el escenario en el que Shackleton está dando una lección magistral de dubstep atípico.

Rematamos la noche con la fiesta gamberra de los Buraka Som Sistema. Un final ideal para el mejor festival de música electrónica del mundo. El año que viene, más.

18 junio 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 18 de junio de 2011

Semana corta pero muy intensa. Las fuerzas están justas pero ha sido muy gratificante. Vamos por partes.

Martes. Mi padre y mi tío han decidido comer en la Fonda España, cerca de mi trabajo. Me invitan a una cervecita y les acompaño en el aperitivo.
Más tarde, en la Boqueria, Bruno Colomer, responsable de enología de Codorníu, dirige una cata de cava a la que tengo la suerte de asistir. Aprendo mucho y lo paso bien mientras trabajo.
Estos últimos días he estado leyendo “Diario de una ama de casa desquiciada” de Sue Kaufman. Libros del Asteroide sigue con su labor de excavar en la historia de la literatura a la búsqueda de joyas no tan notorias como se merecen. La novela es el relato de una crisis contado con un finísimo sentido del humor, con un realismo hiriente y una destreza narrativa notable.

Miércoles. De nuevo en la Boquería. Esta vez, y dentro de la campaña gastronómica “La Rambla està per menjar-se-la” es el xef del Restaurante CentOnze, Eugeni Cortés, el que nos ofrece una clase de cocina en la que explica alguna de sus recetas. “Eye openers”, bombones de foie, mozzarella marinada, pesto napolitano, rodaballo con jengibre y verduritas... por motivos laborales no puedo quedarme hasta el final y me pierdo el postre... Instructivo, divertido, interesante... genial!
Por la noche, y después de muchos aplazamientos, nos reencontramos con Yoli y Rafa en la Tagliatella del barrio. Como siempre lo pasamos bien... pero es tarde y ceno demasiado... lo pagaré durante la noche y al día siguiente. Las fuerzas, ya mermadas, se reducen al mínimo.

Jueves. Hoy empieza el Sónar 2011. El primer día, a mediodía, no hay demasiada gente. Es cuando más me gusta. Toma de contacto con sensación de “Deja vu” pese a los cambios estructurales (pocos). Paseo, miro, río, pienso, veo la exposición “La Trieste de Magris” (espectacular), la exposición “Other Mirrors”, el arranque del concierto de “Toro y Moi” y, vestido con el uniforme de trabajo, huyo acosado por el calor. Mañana será otro día.
Una nueva clase de cocina, esta vez con helados, pone fin a mi jornada laboral.

Hace un par de semanas recibí una carta del colegio en el que estudié once años. Con motivo del aniversario, 25 años ya, de nuestra promoción, me invitaban a una celebración.

Me encuentro con Francesc en los Ferrocarrils de la Generalitat y, como en los viejos tiempos, subimos hasta el colegio recordando los viajes pasados – muchos – y asombrándonos de lo mucho que ha cambiado el entorno. Lo que antes eran campos, ahora son “little boxes” (como dice la sintonía de Weeds). En el colegio, sin embargo, los cambios son mínimos y la nostalgia se dispara. En la puerta nos encontramos con Ramón y empieza el juego de reconocer la cara del niño en el adulto que ahora te abraza. Tras el primer encuentro llegan muchos más. Reconocer un gesto, una sonrisa, una actitud, es un viaje en el tiempo. Mientras los más valientes juegan un partido de fútbol en el polideportivo que nosotros no llegamos a disfrutar, siguen llegando más y más compañeros de clase. Xavi, Ramón P, Blas, Toni, Jordi, Ramón R, Joan Manuel., Quim, Xavi “Furu”, Óscar, Oriol... y los compañeros del C y del A (siempre tan cerca y, sin embargo, a un universo de distancia). También nos reencontramos con algunos profesores como Ramón que fue nuestro profesor en primero y segundo de EGB, Pep que nos tuteló cuando nos hacíamos mayores y Manuel que nunca nos dio clase pero que siempre intentaba que nos apuntáramos al equipo de baseball que estaba intentando crear.

Paseos por las instalaciones, recuerdos, anécdotas pasadas, buenos y malos recuerdos... también intentamos ponernos al día. 25 años de información variada (estudios, trabajos, bodas, nacimientos, curiosidades...) dan para mucho. El recuerdo a los compañeros que hoy no han podido venir, también.

Tras una comida informal en el comedor (que pequeño se ve ahora) seguimos la tertulia en lo que parece una sala de descanso de los profesores. Nacho, que no ha podido venir, nos envía una carta desde Berlín. Más recuerdos – está vez envueltos con cariño y oficio- nos hacen reír y emocionarnos.

Se hace tarde y, ahora que volvemos a estar juntos, no apetece dejarlo. Seguimos la tertulia en el exterior y, después, en un bar no tan cercano. Durante 25 años no nos hemos visto. Sin embargo, cuatro horas después de nuestro reencuentro, la sensación de pertenencia a este grupo, de normalidad y de comodidad, es reconfortante.

Largas despedidas en la calle y promesas de nuevos encuentros que sabemos que tardarán en llegar (espero que lleguen y que asistan los que esta primera vez no han podido).

Viernes. Cansado. Mañana de trabajo. A mediodía me encuentro con Jordi P en el recinto del Sónar.  Cerveza para celebrar su participación en el libro que ha publicado Dani y primeros conciertos. Vemos a Stendhal Syndrome en el Hall (bien) y un poco de Daisuke Tanabe antes de irnos a comer a un japonés cercano.

Sesión de tarde con Atmosphere (cansinos), oOoOO (me gustan), Katy B (no conseguimos acercarnos, la veré esta noche) y un poquito de aquí y otro poquito de allí.

Cena en casa con María José, Game of Trones (grandioso capítulo) y vuelta al Sónar. Esta vez en mi pueblo y de nuevo con Jordi P.

Noche de contrastes, primero entre los sonidos industriales e hipnóticos de Cyclo y la nostalgia de The Human League.  Después entre el directo arrollador de M.I.A y la propuesta más mainstream – pero igualmente interesante – de la británica Katy B. Queda mucho por delante... pero ya soy mayor y necesito dormir un poco. Mañana más.

13 junio 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 13 de junio de 2011

Hoy es festivo en Barcelona. María José y yo lo celebramos dedicando nuestro tiempo a ordenar un poco Graceland. Arreglo una luz que no funcionaba desde hacía semanas, María José cuelga un cuadro que compramos hace dos meses, ordenamos la despensa, tiramos trastos inútiles... el cambio a la ropa de verano tendrá que esperar.

Ayer comimos en la Fonda Espanya (Carrer Sant Pau, 9 Barcelona). Hasta el día 19 ofrecen – mediodía y noche – el Menú Rambles por 25 €. Aperitivo de bienvenida (ayer era pulpo a la gallega con crema de patata) / “esqueixada” de bacalao meloso, olivas de Aragón y Romesco / Salteado de calamares de playa, “escalibada” y butifarra / Carrillera ibérica confitada sobre patatas al mortero y jugo reducido / Gelatina de txacolí, fresa y helado de piel de limón. Todo estaba buenísimo y el marco es incomparable (un comedor precioso decorado a principios del siglo pasado por Domenech i Muntaner).

Hoy, después de adecentar Graceland, nos hemos acercado al “Piripi” para comer en su tranquila – hoy un poco menos – terraza. Se avecina una semana muy intensa, pero estamos instalados en la calma que precede a la tormenta.

12 junio 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 12 de junio de 2011

Oscurece. Llegamos a los jardines de Can Sumarro mientras “Senyors Tranquil”, ya en el escenario, regalan sus canciones al poco público que se reparte por el jardín en el que se celebra el Petit Format. Nuevo folk ribeteado de pop y con toques de otros aromas (como la bosanova). Disfruto de sus buenas canciones y de sus juegos de voces con una cerveza en la mano. Además convierten una de sus canciones “Indis i Cowboys” en un hit al versionearla como lo harían Manel, Mishima, Albert Pla, El Petit de Cal Eril, Quimi Portet, Love of Lesbian... divertido y genial. Carcajadas y admiración.

Tras ellos nos acercamos a la Bodegueta del Museu para hacer unas tapas.


Al volver a Can Sumarro, Joan Pons (el Petit de Cal Eril) acaba de empezar su actuación. El jardín está ahora bastante lleno y la gente más abrigada que de costumbre. El Petit Format sigue siendo un festival encantador, único y muy recomendable. Además es gratuito, el año que viene volveremos.

11 junio 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 10 de junio de 2011

Dejo atrás una semana intensa. Mucho trabajo – especialmente agradable al ver que un proyecto empieza a andar -, actividades nuevas y poco tiempo para dedicarlo al ocio. El premio es un largo fin de semana de tres días.

Una visita al museo de la fábrica Damm despierta muchos recuerdos. Los elementos que ahora se acumulan en unas cuantas salas son parte del atrezzo que ha rodeado nuestra vida: El álbum de cromos – con Johan Cruyff en la portada – que nunca pude acabar (en casa nunca se bebió demasiada cerveza), botellas que ya no recordaba, publicidad, calendarios, elementos decorativos de bares... un chute de nostalgia que me gustó mucho.

Tras el paréntesis, se adivina otra semana llena de trabajo, de encuentros y de reencuentros nostálgicos. Ahora toca descansar y disfrutar de la pausa.

05 junio 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 05 de junio de 2011

Domingo mañana. Escucho “The Last of The Country Gentlemen” de Josh T. Pearson una y otra vez. Escribo mientras María José cocina. El sol que ayer nos acompañó, hoy nos ha abandonado. Ayer, en medio de un ataque de locura por “Game of Thrones” (7 episodios en un día), fuimos a comer en “La Rosa Púrpura”. Carpaccio de bacalao, cigalas encebolladas y la especialidad de la casa: bacalao. Una comida deliciosa que nos dio fuerzas para continuar con nuestra maratón de violencia y fantasía heroica.

Antony Hegarty ahora ocupa el espacio que ha dejado el bueno de Pearson mientras recupero mis lecturas comiqueras de la semana. Un repaso a “David Boring” de Daniel Clowes (a estas alturas ya un clásico) y la algo decepcionante “La Virgen de Plástico” de Proghomme & Rabaté.

Algunos elementos nos descubren la llegada del verano. Los habituales del diario sabéis que para mí, el pistoletazo de salida lo suele dar el incivico/a vecino/a que cada día tira la pastilla de fogo-electric usada a la calle. Hace ya un par de semanas que me encuentro el fruto de sus lanzamientos en mis paseos matinales. Ha llegado el verano.

Se avecina otra semana de mucho trabajo. Intentaré encontrar espacio en ella para pasarlo bien y contarlo.

01 junio 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 01 de junio de 2011

Que Toni me invite a una barbacoa en su casa es una buena noticia. Que Toni y yo decidiéramos vivir en las dos puntas de la ciudad, un pequeño contratiempo. Que Toni elija el peor día, metereológicamente hablando, para celebrar la barbacoa en su terraza, toda una aventura.

Atravieso la ciudad, me mojo y – ya cerveza en mano – ayudo (poco) a Óscar y Toni con la barbacoa. Toni – convertido una vez mas en McGiver – ha improvisado un toldo para proteger las brasas de la tormenta que quiere apagarlas. A duras penas lo conseguimos y, cuando llega Quim, ponemos toda la carne en el asador y empezamos a cenar mientras recordamos anécdotas de no hace tanto.

Estamos acabando cuando aparece – un poco tarde – Jordi M. Más risas, copas, puros y poker. Es tarde cuando, un poco más pobre pero mucho más feliz, inicio el largo regreso a casa.

30 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 30 de mayo de 2011

PRIMAVERA SOUND 2011
Domingo 29, día 7 (y último)

Abandono las crónicas festivaleras con la segunda jornada en el Poble Español, otro encuentro con la nostalgia para poner punto y final a la edición del Primavera Sound de este año. Con Jordi R y Teresa encontramos un sitio cómodo – no hay tanta gente como el miércoles – para ver el concierto de BMX Bandits. Sin prestarles toda la atención que merecen, disfrutamos del concierto mientras repasamos y comparamos sensaciones.

El colofón al festival lo ponen Mercury Rev que revisitan – en un concierto grandioso, épico, teatral y milimetrado – su Deserter’s Songs. Un grandioso final para un festival en el que he visto muy buenos conciertos (si tengo que elegir me quedo con las actuaciones de Grinderman, Sufjan Stevens, M. Ward y Mercury Rev).

María José muchas veces me hace ver las cosas de otra forma. Absorto en la música, no suelo mirar demasiado a mi alrededor. Pero ella me hizo mirar de otra manera para descubrir otra realidad del festival. Una realidad que lo convierte en un gigantesco generador de felicidad. Otro motivo más para seguir disfrutando del Primavera Sound.

Pese a los problemas iniciales (de falta de previsión el miércoles e informáticos el jueves) y a la masificación, el Primavera sigue siendo un grandioso festival. Una oportunidad única para disfrutar de pasado, presente y futuro. Si es posible, el año que viene me encontraréis allí.

29 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 29 de mayo de 2011

PRIMAVERA SOUND 2011
Sábado 28, día 6

Sol y mucho viento. Hay días en los que tienes más de una cita con la nostalgia. La primera, acompañado por María José, Jordi P. y María, con unos Papas Fritas que se han reunido para volver a tocar juntos en el festival. Su “Guys don’t lie” es una de las canciones de nuestra banda sonora particular, poderla escuchar en directo por primera vez – aunque sea tantos años después - es una agradable experiencia.

No lo es tanto, en mi segunda cita del día con la nostalgia, ver a Nosotrash en el Auditori. Lo tenían todo a favor: un escenario único, un público entregado, un puñado de buenas canciones... y lo tiraron todo por la borda en un concierto falto de intensidad, de preparación y en el que habían puesto muy poco cariño. Las colaboraciones de lujo (Fernando Alfaro, Nacho Vegas...) no fueron suficiente para levantar el nivel de un concierto que pudo ser y no fue. Una lástima.

Y, en un día raro, toca aparcar el rock para abrazarse a otra religión. En el escenario más alejado de la entrada del festival, la organización ha colocado una pantalla gigante que nos permitirá seguir la final de la champions. Renuncio a Mercury Rev y a Einsturzende Neubauten  para entregarme a instintos más primitivos. Escuchar el partido por la radio me permite adelantar la celebración del primer gol del Barça (también sufrir unos segundos antes con el empate). Pese a que hay mucha gente conseguimos encontrarnos con Jordi y María y ver la segunda parte juntos. Grandioso partido, grandes goles, fabulosa victoria, fantástico ambiente y extraño festival.

Intentamos volver a la música pero resulta difícil. Nos acercamos a PJ Harvey y vemos un par de temas del concierto en el que Dean Wareham recupera temas de Galaxie 500... pero tengo la cabeza en otra parte y decidimos volver a casa atravesando una ciudad que seguirá de fiesta durante muchas horas.

Un día extraño de festival... pero lo he vuelto a pasar muy bien.

28 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 28 de mayo de 2011

Francisco Casavella no siempre se llamó así. Cuando se convirtió en escritor profesional, Francisco decidió firmar sus libros con otro nombre ya que compartía apellidos con uno de sus escritores favoritos, Juan García Hortelano. Francisco García Hortelano – ese era su verdadero nombre – siempre reivindicaba a su tocayo de apellidos. Y es por eso que me decidí a leer “Tormenta de verano” de Juan García Hortelano. Y su lectura ha resultado un placer. “Tormenta de verano” es un retrato ácido de la sociedad española de la posguerra, un retrato de los vencedores hecho sin concesiones. Seguiré leyendo a García Hortelano, un gran escritor no tan conocido.

PRIMAVERA SOUND 2011
Viernes 27, día 5

Cuando empiezan a fallar las fuerzas, se agradece un concierto en las cómodas butacas del Auditorio del Forum. Al final la suerte me acompañó en el sorteo y tenía mi entrada para disfrutar del doble concierto de DM Smith y Sufjan Stevens.

DM Smith avisó nada más empezar: “tocaré cuatro temas”. Y así fue. Cuatro buenos temas – en dos de ellos acompañado por parte de la banda de Stevens – que nos dejaron con ganas de mucho más y con cuarenta minutos por delante hasta el siguiente concierto. ¿Por qué?

Hay conciertos que justifican la compra del abono del Primavera Sound. El del jueves de Grinderman, sin lugar a dudas, es uno de ellos. El que ayer ofreció Sufjan Stevens es otro de esos gloriosos ejemplos. Barroco, excesivo, teatral, rodeado de buenísimos músicos, íntimo en ocasiones, festivo, arrebatador, galáctico, visualmente impactante, simpático, musicalmente genial, generoso, brillante... Sufjan Stevens nos regaló dos horas de diversión, espectáculo y buena música. Juega en otra división, lo sabe y se permite jugadas que sólo están al alcance de unos pocos elegidos. El brillante final, con todo el público coreando Chigago, fue la culminación de una tarde intensa que recordaré durante mucho tiempo.

Tras el concierto entro en el recinto para seguir disfrutando del festival. Pero podría irme a casa y sería igual de feliz. Entro al recinto mientras escucho a Fred i Son que están tocando en el pequeño escenario que hay a la entrada. Me gusta “Diu que no sap que vol” que suena mientras entrego mi tarjeta de entrada en la puerta del recinto.

Me hago con la primera cerveza del día – sin colas, gran noticia – y me encuentro con Jordi P en el concierto de Tennis. Suenan bien... pero en mi cabeza siguen apagándose los últimos ecos de Chicago y es difícil atender a otros ritmos.

Consigo hacerlo con el impecable concierto que ofrece M Ward en un escenario demasiado grande para su propuesta. Siempre me ha gustado la “americana” y M Ward la interpreta como nadie, tocando todos los palos y defendiéndose en todos ellos con genialidad y un conocimiento profundo. Otro gran concierto.

En un día plagado de buenos conciertos, The National son la siguiente apuesta. Y responden a las expectativas, pero nos hemos situado demasiado escorados, hay muchísima gente y mucho ruido. No son las mejores condiciones para disfrutar de un concierto y decidimos dejarlo al cabo de un rato. Lástima, pero no se puede tener todo.

Nos encontramos con Ángel, con María José y cenamos algo (yo un bastante lamentable falafel pagado a precio de oro) mientras esperamos que empiecen Belle & Sebastian. Otro buen concierto que disfruto – estado físico lamentable – desde la lejanía.

Queda muchísimo (Deerhunter, Pulp, Simian Mobile Disco, Explosions in The Sky, Low, Shellac...) pero yo por hoy tengo suficiente. Quedan todavía dos días y me gustaría llegar con algo de fuerzas a las rampas finales.

27 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 27 de mayo de 2011

Días de calor, de exámenes, de conciertos, de noches largas y pies cansados.

PRIMAVERA SOUND 2011
Miércoles 25, día 3

La esperada – para todos menos para los organizadores – saturación del Poble Espanyol, se une al funcionamiento errático del portal para llevarse de golpe el prestigio que los organizadores del Primavera Sound se habían labrado con años de buen trabajo. En la calle se queda mucha gente sin poder entrar(entre ellos María José y Javi), colas inmensas para hacerse con la pulsera, lavabos insuficientes (no es buena idea poner más surtidores de cerveza que lavabos, un portal colapsado... y lo peor estaba por llegar.

Cuando entro en el recinto, Comet Gain están acabando su actuación. Me hago con una cerveza y me encuentro con Jordi P. y Angel. Eccho and the Bunnymen repasan sus dos primeros álbumes en un concierto anodino. Por suerte la noche remonta con la sensacional actuación de Caribou. Ritmo visual y sonoro, buenos temas, entrega, intensidad, conciertazo. Mañana más.

PRIMAVERA SOUND 2011
Jueves 26, día 4

Primer día en el recinto del Fórum. ¿Volveremos a la normalidad? Triángulo de Amor Bizarro acaban de empezar su concierto. Miro a mi alrededor, nadie tiene cerveza. Es raro. Cuando voy a por la mía descubro que el sistema informático – la gran novedad de este año, la joya del Primavera – que permite pagar con la tarjeta de entrada ha caído y las barras no funcionan (dicen los más viejos del lugar que hay una barra que, superando las dificultades, si que funciona. También dicen las leyendas que las colas son míticas). Sin cerveza disfruto del show de los gallegos y con su final explosivo. Me encuentro con Jordi R, Núria, Elna, que vive su primer festival y Jordi P.

Deshidratados empezamos a deambular por los escenarios a la búsqueda de un buen concierto y – sobretodo – cerveza. No tenemos suerte en lo primero – Moon Duo y Cults no me convencen – y tampoco en lo segundo. Un mochilero nos proporciona – a precio de oro – la primera cerveza de la jornada. Son las 20:00 y empieza Of Montreal a desplegar su espectacular actuación. Funk, rock, luchadores enmascarados, músicos disfrazados, diversión, fiesta... lo pasamos bien.

María José – tras una larga cola – consigue entrar en el recinto y, juntos, cenamos algo y pasamos sed. Veo de lejos el concierto de Glasser mientras me tomo una cerveza y, con Jordi R y Teresa, nos preparamos para ver el concierto del día. Grinderman son brutales. Nick Cave es una bestia escénica, Martyn Casey y Jim Sclavunos son impecables y Warren Ellis, bueno, es Warren Ellis. Buenos temas, ritmos endiablados, emoción, teatralidad... sin lugar a dudas, uno de los conciertos del festival.

El sistema sigue caído pero conseguir una cerveza empieza a ser fácil – si tienes efectivo - .Tras el concierto de Grinderman intentamos ver a Suicide – que vivieron tiempos mejores -, repetir con Caribou – no conseguimos acercarnos a un escenario que se le ha quedado pequeño – y disfrutar de Interpol – pero mi peor gafapastismo militante aparece y me suenan demasiado mainstream para estas horas de la noche -. Decido dejarlo al cabo de unos cuantos temas e iniciar el largo regreso a casa. Pese a los problemas, ha sido un buen día.

25 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 25 de mayo de 2011

PRIMAVERA SOUND 2011
Martes 24, día 2 (part II)

Primera pequeña decepción. Un error al tomar nota, o un cambio de horario inoportuno, o un empleado de Heart of Gold que fue muy amable pero me dio información errónea (un recuerdo para sus ancestros si finalmente ha sido él el culpable)... me dejan sin el concierto (esperado) de Eli Paperboy Reed. Me tengo que conformar con el divertido show de los brasileños Garotas Suecas. En Apolo hay poca gente pero casi todos bailan. Vuelvo a casa pronto, contento y con las fuerzas todavía intactas. Mañana el Primavera Sound empieza a ponerse más exigente, habrá que subir a ritmo.

24 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 24 de mayo de 2011

Fin de semana de comunión en Castelló. La religión cede terreno a lo pagano y la celebración se convierte en la mejor excusa para reencontrarse con la familia. Por un día somos contratados como fotógrafos oficiales del evento. Con una cámara prestada y otra de bolsillo, fotografiamos a diestro y siniestro. En la iglesia – lo juro, no es una invención ni un chiste – un cartel gigante recuerda a los fieles que la eucaristía “sabe a gloria”. Mucha gente. Calor. Tras la ceremonia religiosa, damos paso a la civil: cervecitas en una terraza y comilona familiar en un restaurante que está al cruzar la calle. Esta parte también sabe a gloria pero ningún cartel lo anuncia.

PRIMAVERA SOUND 2011
Lunes 23, día 1

Quien se rinde no lo consigue. Finalmente consigo introducir saldo en mi cuenta del PS y reservar asientos para ver a Sufjan Stevens (sólo es una reserva para entrar en el sorteo, no garantiza nada).  La cosa mejora más cuando, ya con la pulsera que me garantiza la entrada en el festival, me pido la primera cerveza (este año, en Apolo, a 3€) y espero a que empiece el concierto de Nacho Umbert & La Compañía. Está bien que un festival de estas características, de cancha a bandas locales y disfruto del concierto pese al lastre que suponen los imbéciles que han venido a hablar con sus colegas sin respeto ni a los músicos ni a los que queremos disfrutar de la música. Tras el concierto, y con Jordi R que ha aparecido a medio Show, cenamos un bocadillo triste en un bar penoso al que no volveré.
En una noche de contrastes sonoros, rematamos la noche en la [2] viendo el final del concierto de Capsula (que tienen un directo resultón) y disfrutando mucho con la explosión sónica de Betunizer.


PRIMAVERA SOUND 2011
Martes 24, día 2 (part I)

Después de muchos años aterrizo de nuevo en el Fantástico. Pese a los cambios, reconozco la estructura. Ahora es higiénico, y se agradece. Son las 14:20, hora rarísima para un concierto. Me pido una cerveza, me siento en un sofá y Darren Hayman (acompañado sólo por un violinista  – Dan – que quizás es The Secondary Modern) nos regala un breve pero intenso set acústico. Actuaciones como esta son las que hacen que un gran festival tenga valor añadido. Salgo contento, coreando “The greedy ugly people” y con ganas de mucho más. Será esta noche. Seguramente en Apolo.

21 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 21 de mayo de 2011

Vuelve a ser sábado y otra semana ha pasado junto a nosotros a un ritmo endiablado. Así que toca – lo siento – una crónica al mismo ritmo, de los acontecimientos de la semana.

Martes. Me encuentro con Jordi P. en el Malverde. Cerveza, buena música y palomitas. Continuamos la conversación en el San Telmo (delante de un estupendo filete San Telmo), en El Racó de Sants y en un par de garitos más – ambos de dudosa reputación e ínfima calidad. La limitada capacidad motora al final de la noche, hace que, en un gesto que agradeceré enormemente al día siguiente, lance mi última cerveza al suelo del local.

Jueves. Cena en casa de Marta y Joan María con Esther, Albert y María José. Pese al cansancio, se agradecen estos pequeños momentos que permiten coger aire durante la semana.

Viernes. Acabo las “Cronicas Birmanas” de Guy Delisle. Me han gustado, pero “Pyongyang” sigue siendo mi favorito. Intentos fallidos de introducir saldo en mi cuenta del Primavera Sound: 234. Sigo intentándolo ya que es imprescindible para reservar plaza en los conciertos de Sufjan Stevens. Creo que no lo conseguiré, el Primavera de este año no empieza de la mejor manera. Espero que la cosa mejore.

17 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Martes, 17 de mayo de 2011

El próximo día 26, el Palau Güell reabre sus puertas tras una profunda, cuidadosa, laboriosa – han sido más de dos años de obras -  y muy interesante restauración. Tengo la suerte de poderlo visitar unos días antes de su apertura oficial, en una visita guiada por Antoni González que ha sido el máximo responsable de devolver el brillo a este impresionante edificio diseñado por Antoni Gaudí.


El recorrido empieza en la puerta de entrada y nos lleva desde las caballerizas hasta el tejado del edificio. Algo más de dos horas en las que no dejo de sorprenderme por las soluciones arquitectónicas, los mil y uno detalles decorativos artesanales – forja, talla de madera y de piedra, esculturas, chimeneas de “trencadís”... – y por las explicaciones con las que nuestro guía nos deleita.


Intento recuperar esta maravilla entre las nubes de mi memoria pero, ahora que el Palau Güell ha recuperado su mejor cara, los recuerdos oscuros que tenía de este edificio también han desaparecido. Visita obligada a partir de ahora para visitantes y barceloneses. Espero volver pronto para disfrutarlo otra vez.





DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 15 de mayo de 2011

Sigo disfrutando de las indudables ventajas de ser un cumpleañero consorte. En esta ocasión, el fantástico regalo, es una habitación en el Gran Hotel La Florida. Sábado por la mañana, dejamos a Cass con sus canguros – este fin de semana son Eli i Cesc – y subimos al Tibidabo para disfrutar del regalo de María José.

Cuando llegamos al Hotel aún no nos han preparado la habitación. Esperamos en la terraza y aprovechamos para comer unas tapas. Excesivamente caro, pero las vistas de Barcelona – excelentes – y el sol que esta mañana nos acompaña, compensan el dispendio.

Nuestra habitación es espectacular. Es bonita y gigantesca pero está llena de detalles que muestran una preocupante decadencia: desgaste, una bañera de hidromasaje en la terraza que vivió tiempos mejores y ahora no funciona, algún desconchado, lámparas que no alumbran, una inoportuna gotera provocada por el aire acondicionado... el hotel vivió momentos mejores.

El sol, en lucha con unas nubes cada vez más numerosas, se resiste a abandonarnos. María José hace la siesta y yo escribo junto a la ventana. Vuelve a oler a vacaciones.

María José se despierta y salimos con la intención de dar una vuelta. Nos acercamos al parque de atracciones y deambulamos entre nuestros recuerdos. Amenaza tormenta. En la tienda que hay en la base del templo expiatorio no tienen pipas, pero es allí donde decidimos subir hasta los pies de la estatua que corona el templo. En el ascensor, el monje encargado de las visitas, nos cuenta anécdotas, historias y leyendas que hacen mucho más amena nuestra ascensión. Vistas privilegiadas pese a la meteorología y muy poca gente. Ha valido la pena subir hasta aquí.



Bajamos. Compramos chucherías y unas palomitas que tienen sabor a nostalgia. Caen las primeras gotas.

De nuevo en la habitación del hotel miramos como la tormenta crece. He empezado a leer “Tormenta de Verano” de Juan García Hortelano. Pienso en Francisco Casavella a quien debo esta lectura. Llaman a la puerta. La dirección del hotel nos obsequia con un “baño romántico” por las pequeñas molestias sufridas. Pétalos de rosa (una guarrada si se me permite decirlo) y velas (que crean un ambiente muy acogedor).

Tras el baño y rodeados por la tormenta, nos quedamos a cenar en el bar del Hotel (el restaurante está lleno). La carta es corta pero cenamos bien.

Domingo. La tormenta ha dado paso a un día en el que el sol avanza eliminando las últimas nubes. Hace algo de frío y por eso descartamos desayunar en la terraza de nuestra habitación.


Mañana de descanso, de baño en el spa del hotel, de lectura, de sol (demasiado, como suele ser habitual en nosotros) y de vistas reconfortantes. Agradezco un regalo que no es mío pero que he podido disfrutar (Moltes gràcies, guapus!!!!!). Pilas recargadas otra vez.

14 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 13 de mayo de 2011

Las semanas se suceden a un ritmo vertiginoso. Ya estamos de nuevo en un – dicen que será lluvioso – fantástico fin de semana.

Por suerte, en el trabajo, no todo es trabajo. Jueves de fiesta en el Tablao Cordobés (La Rambla, 35). A Cristina Hoyos le conceden la Mezquita de Plata y, a todos los que tenemos la suerte de asistir, un espectáculo flamenco de gran nivel. Al elenco habitual se ha añadido un bailarín brillante: Jesús Carmona es la nueva joya del Cordobés. Disfruto del espectáculo y del regalo de ver sobre el escenario a Cristina Hoyos bailando.

Por el camino he acabado “The Hobbit” de J.R.R. Tolkien. No ha pasado nada malo.

08 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO

Domingo, 8 de mayo de 2011

Una de las ventajas de que tu pareja cumpla años, es que puedes compartir alguno de sus regalos. Cuando uno de esos regalos es una habitación en el Hotel Sant Pol de S’Agaró, la alegría por poder compartirlo es inmensa.



Escribo desde nuestro balcón. Vistas privilegiadas sobre una playa que es mi infancia. Hace sol y el mar ruge como nunca suele hacerlo en esta playa. En la playa – aún es pronto – sólo hay cinco surfistas en remojo y un abuelo de boina que, sentado, mira al mar. Acabamos de desayunar y, mientras yo escribo esto, los gorriones que nos han acechado durante el desayuno acaban con las últimas migas de su banquete matinal y María José se regala un baño relajante.

Ayer me dormí escuchando – pese a las puertas cerradas – el rugido del mar que hoy me ha despertado. Podría quedarme a vivir aquí.





ENROQUE

El enroque es una jugada de ajedrez que permite al jugador alcanzar una posición más defensiva en una sola jugada en la que mueve dos piezas.

Esta maniobra ajedrecística se ha utilizado mucho en política últimamente. La cosa funciona así: se coge un argumento – no importa si este es verdadero o falso, es más, mejor cuanto más alejado esté de la verdad -, se hace piña con correligionarios y seguidores, se empieza a repetir el argumento con insistencia y, finalmente, se convierte en certeza inamovible. Berlusconi es un maestro en este arte y, en nuestro país, el PP no le va a la zaga. En ocasiones la maniobra sale mal (“Ha sido ETA”), pero pese a eso se puede seguir enrocado durante el resto de la partida (hay quien hoy todavía afirma la autoría no islámica del atentado del 11 M en Madrid). Lo triste es que, la mayoría de las veces, la maniobra tiene réditos positivos para quien la realiza (así lo demuestra la última encuesta del CIS en Valencia). No importa la realidad sino lo que se cuenta.

Naturalmente el PP no es el único practicante del enroque político. El PSOE (“No hay crisis”, “No llegaremos a los 4 millones de parados”) también lo han intentado. Pero, recién llegados a la práctica del enroque, aún no han aprendido a cerrar filas cuando la realidad evidencia sus mentiras y les suele salir el tiro por la culata perdiendo muchas piezas en cada partida.

Esta semana he asistido, estupefacto, a un nuevo tipo de enroque: el enroque futbolístico. Tras la semifinal de Champions League entre el FC Barcelona y el R Madrid vimos el lamentable espectáculo de los perdedores repitiendo – como si de un mantra con virtudes terapéuticas se tratara – los mismos argumentos expresados con guiones aprendidos y utilizando, una y otra vez, las mismas palabras. El enroque alrededor de una mentira – que se pretende que por repetición alcance la categoría de verdad – tiene la máxima expresión en las grises comparecencias ante la prensa del segundo entrenador del equipo que perdió la eliminatoria. “Lo ha visto todo el mundo” fue su principal argumento.

Al día siguiente repasé la prensa internacional que, como suponía, vio el mismo partido que yo, un partido distinto al que vendía el segundo blanco. Si, todo el mundo lo vio, pero vio una cosa distinta a la que tu quieres vender. Pese a eso, jugadores, seguidores y directivos siguen enrocados.

El enroque basado en una mentira evidente sólo puede tener un valor de redención ante los fieles seguidores que, pese a las evidencias, cierran filas en torno a sus líderes. Entiendo que se utilice, aunque me disguste y me asuste un poco. En general, todos tendríamos que ser mucho más críticos con lo que nos cuentan. Sólo así seremos capaces de vencer la resistencia que supone un enroque tramposo.

06 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Viernes, 06 de mayo de 2011

Viernes. Llego con la barra de energía cerca del punto crítico. Toca recuperar energías, lo intentaré desde ahora mismo. El trabajo ha dejado pocas cosas que explicar: algún ratito de lectura (“The Hobbit”), la última película (“Los chicos están bien” de Lisa Chodolenko) en el festival de cine de nuestro pueblo y noches de series (“Boardwalk Empire” y “Nurse Jackie”) con María José. Empieza el fin de semana.

04 mayo 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 01 de mayo de 2011

Sábado. En el pequeño festival cinematográfico de nuestro pueblo vemos “Herois” de Pau Freixas. Emocionante, divertida, nostálgica, tierna... grandiosa película con valor añadido para los que fuimos niños en los ochenta y pudimos disfrutar de esos veranos llenos de momentos mágicos y amigos que nos acompañan desde entonces. Muchísimos homenajes – algunos compartidos, otros no (pero igualmente despiertan nostalgia) –, una ambientación genial y recuerdos y más recuerdos que te dejan con ganas de abrir el álbum de fotos para poder recordar aquellos largos veranos llenos de luz.

Domingo. Hoy toca barbacoa en Graceland. Con M. Carmen y El Jefe disfrutamos del patio. Por la tarde vemos “Conocerás al Hombre de Tus Sueños”, decepcionante.

Lunes. Veo “La Red Social”. Ritmo trepidante, grandiosos diálogos, gran película.

Martes. Antes del partido, James decide hacer un poco de turismo por la ciudad. Está en Barcelona y esta noche pretende disfrutar de una semifinal de Champions League con su hijo que viste una camiseta del Barça con su nombre. En el metro, camino del estadio, ve caer una cartera al suelo mientras se cierran las puertas y el metro arrranca. La vuelve a mirar. Es la suya. La coje. Sólo falta el dinero, las entradas para el partido y todas sus ilusiones y las de su hijo. Por la noche, mientras disfruto del partido y del pase a la final, no puedo dejar de pensar en ellos. 

30 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 30 de abril de 2011

Viernes noche. María José y yo ponemos fin a una semana extraña – cuatro días, muchas horas de trabajo, poco movimiento (mucha gente de vacaciones o a medio gas) – asistiendo al modesto festival de cine que hacen en nuestro pueblo. Vemos la decepcionante “Chico y Rita” (buenos dibujos, mejor música, animación innecesariamente afectada y guión nulo o digno de función de fin de curso de primero de primaria – pese a que viene co-firmado por Ignacio Martínez de Pisón -). Mal principio para un festival que, pese a su sencillo formato, nos ofrece la oportunidad de ver cine actual en versión original y a un precio más que asequible (siete películas por 10 euros). Seguro que la cosa mejora en las próximas sesiones.

La semana, antes del brillante momento en el que se inicia el fin de semana, había dado para poco. La eterna lucha entre el bien y el mal ahora trasladada al fútbol (Darth Wader también tiene seguidores... pero sin duda es el malo) ha ocupado parte de mis neuronas. “Los Profesionales” de Carlos Giménez, en la edición integral y en formato pequeño que ha editado Debolsillo y los juegos de consola portátil, han consumido el resto de mis recursos.

Y hoy, sábado, ha tocado trabajar. Trabajo fácil. Asistir a un congreso. Pero trabajo al fin y al cabo. Pese a eso ha sido agradable reencontrarme con Núria, con la que trabajé hace más de 10 años, con Javi, con el que hemos compartido muy buenos conciertos, con Núria 2, de la que he recibido una buena propuesta (relacionada con el trabajo, pero interesante) y conocer a Dani (con el que había intercambiado mails y información, pero al que nunca había saludado en persona). Después vuelta a casa con previo paso por el puesto de pollos a l’ast y comida con María José y mucho cava para preparar una tarde y una noche que se prevén llenas de interesantes actividades.

25 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 25 de abril de 2011


Último día de vacaciones. Hay que aprovechar las últimas horas de lectura, de juegos, de buenos ratos compartidos, de ocio, de buena música... mañana volvemos al trabajo con la carga extra de energía que nos han dado estos últimos cinco días. Ocio en estado puro, una gozada.

23 abril 2011

Sábado, 23 de abril de 2011

Vacaciones. Son sólo 5 días, pero después de tanto tiempo, saben a gloria. Nuestros planes de pasar unos días en S’Agaro, han dejado paso a una agradable estancia en Graceland. La incierta meteorología y un montón de temas pendientes por la falta de tiempo tienen la culpa.

Películas, series, lecturas, largas partidas a diferentes juegos, paseos cortos con Cass, siestas larguísimas, comidas a destiempo y horarios desarreglados... estamos de vacaciones y, aunque no medie desplazamiento, se tiene que notar.

El jueves comimos en el Restaurante Spiral. Una serie de circunstancias nos dejaron al pie del edificio proyectado por Toyo Ito y probamos suerte con su menú del día. El restaurante es muy agradable y el menú muy correcto. Volveremos.

El Solar de los Sueños es un manga dibujado por Hideji Oda. Tiene un dibujo interesante pero la historia no ha acabado de engancharme. Demasiado simbolismo para mi gusto.

20 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Miércoles, 20 de abril de 2011

Sigo leyendo a Agustín Fernández Mallo. Podría continuar haciéndolo toda la vida. De hecho, pienso, lo hago inconstantemente cuando me enfrento a los blogs – llenos de ficciones más o menos basadas en la realidad – de los otros Fernández Mallo que alimentan mis lecturas internaúticas. Su Nocilla Experience me ha gustado y, tanto en ella como en su Nocilla Dream, he visto el pulso de la literatura de nuestro tiempo. Una literatura hecha de fragmentos que puede ser buena o mala. La de Fernández Mallo es buena, la mía no. No obstante, en el aparente desorden que sigue, hay una pequeña influencia suya. Todo lo que leemos alimenta nuestra escritura, algunas cosas más que otras.

En el nuevo punto de lectura de ocioso salen seis macetas. La de la izquierda, con tres flores, es de color verde. El cactus que tiene a su derecha también es verde, pero menos luminoso. El dibujo del nuevo punto de ocioso ha sido dibujado por un niño de la Escola Vila Olímpica de Barcelona. Al fondo, un cartel anuncia la funcionalidad del establecimiento representado. Sobre el mismo fondo amarillo que tiene la tercera maceta, ocioso lee “fluristaria” y no puede evitar una sonrisa cada vez que lo ve. El punto ya ha pasado por dos libros y está esperando su tercera lectura.

Huele a mar. Xavi pasea por las calles de una población costera. Podía haber venido para retratar peces, playas o barcas, pero ha venido para retratar piedras. Mañana se acercará al lugar, algo alejado del centro de la población, donde han estado – y seguirán estando – las piedras. Desde una cabina telefónica llama a María José que hoy cumple 19 años. Le felicita, hablan un poco y Xavi cuelga pensando que quizás empieza a gustarle un poco. Come anchoas – la especialidad local - y unos mejillones buenísimos en un pequeño restaurante al que nunca volverá. Pasea por calles vacías, se toma un gintònic en un pub triste y se retira a la habitación que ha alquilado en una – todavía más triste – pensión.

Cada año nos reunimos para celebrar los cumpleaños de mi madre, mi hermana y María José. La cifra que adorna el pastel suma cada año tres. Este año 145. Mi madre ha preparado un mar i muntanya que nos sorprende casi tanto como nos alegra.

Siempre que vamos a casa de Albert i Esther, Albert tiene que bajar a abrir la puerta. A algún vecino iluminado se le ocurrió – hace años, cuando todavía no vivían aquí - que el portero automático solo sirve como medio de comunicación y que para abrir la puerta es necesario utilizar la llave. Besos, abrazos y subimos en el ascensor. María José abre la puerta y nos encontramos con un montón de felicitaciones, serpentinas, gritos y amigos... es una fiesta sorpresa para celebrar el cumpleaños de María José que también me sorprende a mí. Poco a poco voy reconociendo los rostros que gritan, veo a Ana, a Esther, a Jaume haciendo fotos como un loco, a Marta, a Juan Maria, a David, a Pau y a Núria. A María José le hacen un regalo brutal, una animalada que no soy capaz de describir con palabras y que le hace muy feliz. Después cenamos. Me gusta mucho estar con esta gente.

Leo “Río Veneno” de Beto Hernández. Es una “precuela” de Palomar (para mí lo es ya que las he leído en orden inverso) y, pese a ser un cómic fascinante, carece de la magia deliciosa que envuelve las dos entregas de Palomar.

Mariona nos deja se terraza para que celebremos el cumpleaños de María José con un aperitivo. Hace sol. A las 10 subo a la terraza y empiezo a preparar los platos. Dos horas después empieza a venir gente a la que queremos: Olivia, Roberto, Martina, Leo, Víctor, Laura, Jordi P., María, Quim, Carol, Noa, Montse, David, Roger, Iu, Mariona (que está en su casa), Daniela... son casi las 7 de la tarde cuando decidimos dejarlo ante el preocupante olor a carne quemada que alguno de nosotros ya desprende.

14 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Jueves, 14 de abril de 2011

“En la vida se puede ser de todo menos un coñazo”
Michi Panero

“In a hole in the ground there lived a hobbit. Not a nasty, dirty, wet hole, filled with the ends of worms and an oozy smell, not yet a dry, bare, sandy hole with nothing in it to sit down on or to eat: it was a hobbit-hole, and that means comfort.”
J.R.R. Tolkien. The Hobbit or There and Back Again

En el nuevo punto de lectura de ocioso salen seis macetas. La de la izquierda, con tres flores, es de color verde. El cactus que tiene a su derecha también es verde, pero menos luminoso. El dibujo del nuevo punto de ocioso ha sido dibujado por un niño de la Escola Vila Olímpica de Barcelona. Al fondo, un cartel anuncia la funcionalidad del establecimiento representado. Sobre el mismo fondo amarillo que tiene la tercera maceta, ocioso lee “fluristaria” y no puede evitar una sonrisa cada vez que lo ve.

“Jose Santos Chocano mató a Edwin Elmore Letts. En Lima. En 1925.”
Félix Romeo. José Santos Chocano. En Cultura/s 457

El árbol caído me da trabajo. Me reúno, escucho a gente que quiere ser califa en lugar del califa, voy a entregas de premios, escribo, hablo por teléfono, me aburro, cierro tratos, me divierto, reparto puntos de libro y buenas y malas noticias.

Empiezo a leer The Hobbit. Esta vez en inglés.

“José Santos Chocano fue asesinado en Santiago de Chile, en 1934, por un perturbado, Martín Bruce Badilla, que creía que estaba en su poder el plano del tesoro que los jesuitas habrían enterrado en el subsuelo de la ciudad”.
Félix Romeo. José Santos Chocano. En Cultura/s 457

Hablar de etiquetas durante horas es un coñazo. No me interesa hablar de postpoesía. Las etiquetas son para los que necesitan tenerlo todo ordenado o disponen de tiempo para discutir las categorías. Sólo hay una literatura posible: la buena. Lo demás son letras juntas, con más o menos gracia. Leo “Nocilla Dream” de Agustín Fernández Mayo y me gusta. Mucho. Hay oficio y se agradece, hay literatura y se disfruta.

“Haz que mi vida sea misteriosa: no hay nada más atractivo que el misterio”
José Santos Chocano. El libro de mi proceso.

Paseamos por las calles de Ciutat Vella. En la puerta de un bar hay un perro enorme. Entramos y pedimos una cerveza. Jordi P y yo hablamos del pasado, del presente y del futuro. En el bar se está bien y suenan muchos temas viejunos. Al salir, el perro sigue estirado en la puerta.

Eli cree que el Hobbit está maldito. Nunca ha visto señales que se lo indiquen, tampoco interpreta el texto en otro sentido, ni adivina claves ocultas tras las peripecias de los enanos. La primera vez que empezó a leerlo pasó algo malo y lo dejó. Lo volvió a intentar un tiempo después y un nuevo acontecimiento doloroso le empujó a dejarlo de nuevo, esta vez para siempre. Prefiere leer otras cosas y no tentar a los dioses que, ocultos tras las aparentemente inofensivas frases del libro, juegan a los dados con nuestros destinos.

Messi marca un gol. Jordi P. y yo bebemos cerveza y comemos cacahuetes. Mis cacahuetes son picantes. Los de Jordi no. También nuestras cervezas son diferentes. Pero a ambos nos rodea la misma gente, mezcla de nacionales, nacionalizados y extranjeros. Casi todos beben cerveza y gritan UIIII cuando la pelota pasa cerca de unos palos blancos.

María José y Kris comen en Graceland. Han pedido comida para llevar en el japonés de la puerta de al lado. Hablan de cosas de trabajo y, cuando Xavi llega, le invitan a comer. Xavi come un poco de sashimi (atún y salmón), un pequeño rollo, un par de gambas y un poco de arroz. Le gusta todo.

Empiezo “Nocilla Experience” y casi lloro con la cita de Michi Panero. Me prometo, una vez más, volver a ver “El Desencanto” y “Después de tantos años”.

La persiana dice basta dejando a la habitación en una oscuridad incómoda. Al quinto día, las hojas de la planta que está en la mesita de noche de María José, empiezan a perder el color verde. A falta de soluciones técnicas, se decide cursar un traslado que devuelva el verde a las hojas. Seguimos esperando la llamada del servicio técnico que devolverá la luz a nuestro dormitorio.

Acaba el partido. Jordi propone cenar en el Cardamon. Excelente idea. Comemos un escabeche de atún, naams con brie y un curry de buey. Bebemos cerveza. Los propietarios se han peleado con Moritz y ya no tienen Epidor. No me gusta la Moritz pero si la Epidor. Ambivalencia sentimental ante la desaparición de las cervezas. Mucha comida. Conversación interesante. Somos los últimos en abandonar el local.

Lo he pasado bien, y casi conocí en 
una ocasión a Michi Panero, 
y es bastante más de lo que jamás 
soñaríais en mil vidas. 
¡Mirad, las niñas van cantando! 
(Niñas): Shalalaralalá.”
Nacho Vegas. El hombre que casi conoció a Michi Panero.

Paseamos por las calles de Ciutat Vella. En “La Granja de Gavà” nos permiten una última copa. Es la hora de las últimas confidencias. Apagan la música y, llenos de cervezas y de historias, dejamos nuestras copas a medias. Compartimos un taxi para volver a casa.

El aparente desorden de la crónica de hoy, fragmentada, hecha de pedazos y sin continuidad espacio-temporal, se debe a una mala digestión de mis lecturas. Recuperar la normalidad tras leer a Fernández Mallo no siempre es fácil y apetece un – aunque sea torpe – pequeño homenaje.

12 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 12 de abril de 2011

Lunes extraño. Muchas reuniones, presentaciones, reencuentros, pocos minutos de descanso... pero a pesar de todo ha sido un buen día.

En el nuevo Hotel Bagués he podido ver parte de la colección de joyas de Masriera que exhibirán en su pequeño museo. Impresionante, espero volver pronto cuando la colección esté completa. Aprovecho para comer en El Regulador (La Rambla, 105. Barcelona. Teléfono: 93 343 50 00). Mientras esperamos el primer plato, vemos como se desploma uno de los plátanos del paseo. Milagrosamente, nadie resulta herido.

Más reuniones. Aprovecho los trayectos entre ellas, a pie, para hacer las llamadas pendientes.

Por la noche, me reencuentro con María José y, al fallar nuestras primeras opciones – los lunes, ya se sabe – acabamos celebrando el cumpleaños de María José cenando en el Sakuraya. 

10 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 10 de abril de 2011

Curiosamente, una de las peores convocatorias de los “aperitivos del sábado”, se convierte en una de las más concurridas. La Bodega Elkano no acaba de convencernos a todos pese a su bizarra decoración. Por suerte “El Niño” se ha hecho con la mesa que han puesto en la calle para los fumadores y la vamos ocupando poco a poco: Mariona, María José, Víctor, Laura, María, Jordi P y Carol P.

De nuevo en la calle, compartimos el verano con los aficionados del USAP que llenan la ciudad con los colores de la bandera de Catalunya.

Hoy toca quedarse en casa, disfrutar del patio y de esta primavera que nos acompaña y coger fuerzas para una semana que se prevé intensa.

09 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 09 de abril de 2011


Escuchando a Aias (¡Cuánto cuesta estar al día!) espero a que llegue la hora del aperitivo semanal y entonces me doy cuenta de que ya ha pasado toda una semana y que se impone – una vez más – una crónica de aliño que resuma estos siete días que han pasado volando.


Nos quedamos en el tren. Al final María José despertó y pasamos el fin de semana en Castellón. Familia, fiesta, comida (mucha comida), tracas, paseos... y vuelta en tren a Barcelona.

Semana de trabajo con tiempo para visitar, en la Sala Pares, la excelente exposición de Alejandro Quincoces. Paisajes con luces huidizas que retratan una ciudad que son todas las ciudades, fuerza, intensidad, abstracción y realismo. De verdad, vale la pena.


Entonces llegamos al final” es una novela de Joshua Ferris que retrata las relaciones laborales. Llega la crisis y en una agencia de publicidad empiezan los despidos y con ellos los rumores, las paranoias, los miedos por perder un trabajo que se detesta... Ferris reconstruye con maestría y mucho sentido del humor un universo – el laboral - en el que muchos nos sentiremos reflejados. Quizá tu seas Lynn Mason, o Joe Poppe, o el Viejo Brizz, o Hank Neary... quizás tu compañeros de trabajo se parecen a Genevieve Latko-Devine, a Marcia Dwyier, a Jim Jackers o a Amber Ludwig... seguro que también te ríes con las anécdotas que cuenta Benny Shassburguer o has ido a un nuevo restaurante por la recomendación de Karen Woo. Quizá tu también creías que Tom Mota volvería para vengarse o te has deprimido como Chris Yop... en la novela de Ferris, lo queramos o no, estamos todos, para lo bueno y para lo malo. Y es una gozada poder reírte de todo ello – tú incluído -.

“Estábamos malhumorados y demasiado bien pagados. Nuestras mañanas carecían de alicientes. Quienes fumábamos por lo menos teníamos algo que esperar a las diez y cuarto. A la mayoría nos caía bien casi todo el mundo, unos pocos detestábamos a determinadas personas, a uno o dos les gustaba todo, querían a todos y por eso eran objeto del unánime vilipendio. Nos encantaban los bollos que, de tarde en tarde, nos daban gratis por la mañana. Nuestros privilegios eran asombrosos por su cobertura y calidad. A veces nos preguntábamos si merecían la pena. Pensábamos que quizá sería mejor marcharnos a la India, o volver al parvulario. Hacer algo con los disminuidos físicos o trabajar con las manos. Nadie se dejó llevar jamás por tales impulsos, pese a sus crispaciones cotidianas, en ocasiones constantes. En lugar de eso, nos reuníamos en salas de conferencias para hablar de los asuntos de la jornada. “
Joshua Ferris. Entonces llegamos al final

Y acabo la crónica y me voy al aperitivo. Es sábado y hay que disfrutar de este verano que nos han adelantado.

03 abril 2011

DIARIO DE UN OCIOSO
Sábado, 2 de abril de 2011


Escribo desde el tren. A mi izquierda, el mar y, a mi derecha, María José durmiendo... es agradable. Escucho el nuevo disco de los Manel y a Los Enemigos, leo el periódico y escribo. Otra semana que ha pasado como un suspiro sin que nuestro cansancio nos permita darnos cuenta. El cambio de horario lo hace más fácil. Empezamos el día levantándonos pronto y encontrando en las mañanas - desayuno y un buen rato compartido - uno de los momentos de calidad del día. Cuando llego al trabajo me suelen recibir las campanas de una iglesia cercana, empieza la larga - unos días más que otros - jornada laboral (por suerte sigo pasándolo muy bien). A mediodía los dos - el día que el trabajo lo permite - nos encontramos en Graceland para comer. Esta semana - "Here comes the sun" - en el patio, todo un lujo. Da pereza dejar este pequeño paraíso y volver a entregarse al trabajo donde dejaremos las pocas fuerzas que nos quedan. El tercer momento de calidad del día, llega por la noche: cena, repaso del día, quizás un poco de tele (series, a poder ser y entre semana, cortas)y un rato de lectura hasta que el sueño nos vence. Por el camino también ha habido tiempo para pasear o jugar con Cass, intentar que la mugre no entierre Graceland - y a nosotros con ella - y hacer que las telarañas no se eternicen en la nevera.

No sería justo que - harto del papanatismo del que algunos medios hacen gala con los Manel - no hablara de su segundo disco "10 milles per veure una bona armadura". Como muchos, cada vez somos más, estoy cansado de escuchar como - por amiguismo, por un localismo irracional que nos empequeñece, por un posicionamiento "cool"...- se analizan, como si estuviéramos ante los artistas más grandes de la historia de la humanidad, las virtudes de una banda que tiene muchísimas. Me gustan Manel pero la atención exagerada de algunos periodistas - normalmente sin conocimientos ni un particular interés musical - hacia el nuevo disco de los Manel me provoca una reacción negativa. Por eso he dicho que sería injusto no hablar de "10 milles" ya que me parece un disco todavía mejor que "Els millors professors europeus". En su segundo disco, las promesas que se adivinaban, las posibilidades que se apuntaban, se han convertido en realidades. Sin caer en la fácil tentación de repetir la fórmula que les dio un merecidísimo éxito, Manel se han lanzado a seguir buscando, a seguir proponiendo y a seguir acertando.
Sería muy injusto que alguien se perdiera "10 milles" por el hartazgo y el cansancio que provoca la atención desmesurada ante cualquier fenómeno. Las cosas se han de medir en su justa medida y no aisladamente sin tener en cuenta el entorno global en el que estamos inmersos. También sería un error perderse este disco por una simple cuestión de lenguaje (las canciones de Manel son en catalán), ya que este no suele ser un obstáculo a la hora de consumir música en otros idiomas.
"10 milles per verure una bona armadura" es una evolución, un paso adelante valiente que hay que escuchar muchas veces y disfrutar. Manel no son los gigantes supremos que algunos nos quieren vender, pero son muy grandes y su segundo disco lo demuestra.

Acabamos de dejar atrás Tarragona. María José aún duerme - parece contenta - y Castelló - que está celebrando su fiesta mayor - nos espera.

Feliz fin de semana a todos y Magdalena, festa plena!.