Viernes, 20 de octubre de 2006
Hoy no trabajo pero pese a eso mi rutina matinal es prácticamente la misma. El día cambia a la hora de irme a trabajar. En vez de emprender, como cada día, el largo camino que me lleva a Levi Pants, me quedo en casa escuchando la radio. Cuando llega María José comemos y empezamos a prepararnos para la boda de Quim y Carol.
A la hora convenida un taxi nos recoge en Graceland y nos lleva al centro de

Novios guapos, cura, boda, arroz, abrazos y besos... y al banquete.
El banquete es en el Zoo de Barcelona. Es extraño cruzar la puerta de noche y pasear

hasta la zona del aperitivo con avestruces a un lado y guanacos en el otro (no vemos, por desgracia, más animales, aunque, de tanto en tanto, se escucha el canto de algún pájaro de difícil nombre).
El alcohol empieza a hacer estragos entre los asistentes a la boda. Estoy esperando mi segundo Bloody Mary cuando un caballero (aparentemente respetable... la elegante vestimenta puede engañar mucho) me pregunta “- y tu que prendràs Maria Pilar”. No se me ocurren respuestas, cojo mi bebida, pongo cara de poker y abandono la barra con el deseo de que el señor deje algo de bebida para los demás o acuda el lunes – sin falta – a su oculista.

Tras el aperitivo vamos a la carpa y disfrutamos de la cena en compañía de un buen grupo de amigos. Las risas acompañan las viejas anécdotas que siempre acabamos por contar.
Nos lo estamos pasando muy bien pero tras el baile somos los primeros en abandonar. Nos hemos levantado muy pronto y estoy muy cansado.
No tenia ni idea que en el zoo se pudiera celebrar una boda!! Me encanta la idea!!
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