18 agosto 2014

DIARIO DE UN OCIOSO
Domingo, 17 de agosto de 2014

Vacaciones, días 1 al 9

Llevamos una semana instalados en S’Agaró. Siete días dan para mucho, casi todo bueno. Asumidas las rutinas que hemos perfeccionado año tras año (playa a primera hora de la mañana para que Cass juegue, desayuno en el balcón, baño en La Conca, cervecita en Little Odessa, aperitivos, siestas, lectura...) sólo queda anotar en la parte negativa la nula conectividad. Hacer una llamada no siempre es fácil, recibir un correo resulta una quimera y colgar una foto en instagram todo un éxito. Convertidos en náufragos, vamos recogiendo claves de wifis ajenos para poder navegar en condiciones.¡Que difícil es estar sin una conexión decente!

Hacer una crónica de nuestra estancia en este paraíso particular, sería harto aburrido (debido, en parte, a las rutinas ya mencionadas que convierten nuestros días en pequeños clones con minúsculas mutaciones. Es por ello que sólo destacaré algunas de las cosas que han pasado estos últimos siete días.

He leído el “Mars del Carib” de Sergi Pons Codina, un libro ideal para empezar – o acabar – el verano. “Mars del Carib” es el nombre de un bar de Sant Andreu que se convierte en el punto de encuentro de una serie de inadaptados que navegan entre la pequeña delincuencia y los paraísos artificiales que las sustancias – legales e ilegales – les proporcionan. Tremendamente divertida, “Mars del Carib” es una novela que camina entre la picaresca y el retrato sociológico en clave de humor. Le debo las primeras carcajadas del verano.

En Sant Feliu de Guixols, el Atzavara Club organiza – desde hace 20 años y en quince ediciones– el “Sant Feliu Fest.”, un festival de pequeño formato hecho con pasión y ganas de pasarlo bien. En el patio del antiguo matadero me encuentro con Jordi R y con Núria – María José vendrá más tarde – para disfrutar de una tarde de rock y de cerveza.
La tarde empieza con el incendiario country punk de los Th’ Booty Hunters, continua con el sonido rotundo de Black Islands, se rompe con el hardcore salvaje de KLS y con la explosividad del directo de Giganto. El directo de Biscuit me recuerda el mucho tiempo que llevo escuchándolos (y cada vez mejoran ) y acaba la noche con el directo, siempre sorprendente, de Za. ¡Genial! Si puedo, el año que viene, vuelvo.

Aquí no hay tanto tiempo para la tele. Pese a eso siempre hay tiempo para continuar el visionado de la saga Star Wars y para nuevas series. Hemos empezado a disfrutar de House of Cards, un reverso – dejadme utilizarlo - oscuro de El Ala Oeste de la Casa Blanca que nos está gustando mucho.

El padle surf es un invento del diablo. David intento enseñarnos y casi consigue asesinarme. Tras dejarme las rodillas en la tabla y tragarme medio Mediterráneo en cada una de mis caídas, he decidido que esto no es lo mío. Lo volveré a intentar e igual consigo ponerme de pie... o ahogarme.


Ahora intentaré colgar este diario. Si lo estás leyendo es que lo he conseguido.


No hay comentarios: