27 mayo 2008

DIARIO DE UN OCIOSO
Lunes, 26 de mayo de 2008


Sábado. Día de lluvia y perezas. Me dedico a ordenar un poco el caos que amenaza con sumergirme.
Mi interés por el Festival de Eurovisión – que se celebra esta noche – es nulo, pero mi intención de prescindir de él naufraga al llegar la invitación de Quim y Carol que celebran en su casa una cena con seguimiento del Festival. Y puede más una cena con amigos – a los que me apetece mucho ver – que mis reticencias ante una broma que se ha alargado mucho más de lo que sería de desear (a un coste insultante para una empresa pública que tiene un déficit de tamaño considerable).
A parte de los anfitriones, nos encontramos con Clara, Roger y Toni. La cena, con las votaciones del festival como telón de fondo, se remata con una larga sobremesa. Las cervecitas, el vino, el gin-tonic que me prepara Roger... la resaca mañana está asegurada.

Domingo. Más lluvia, resaca moderada y perezas aumentadas. El día pasa lento mientras vemos series (“Wexter”, “Aquellos maravillosos años”...) y leemos un poco. Por la tarde nos acercamos al TNC para ver “Què va passar quan Nora va deixar el seu home o els pilars de les societats”.Que va passar quan Nora va deixar el seu home

“Què va passar...”, un texto de la Nobel de literatura Elfriede Jelinek, retoma los personajes de “Casa de Muñecas” de Henrik Ibsen justo en el punto en el que acababa la obra del autor noruego. El resultado es un texto duro y combativo que podría resultar excesivamente correoso si no fuera por que viene acompañado de multitud de elementos que nos lo acercan y adornan.
Y eso es lo que hace la excelente dirección de Carme Portaceli que consigue hacer atractivo un texto bueno pero excesivamente denso. Todo ayuda: excelentes interpretaciones (Lluïsa Castell inmejorable como todos los demás), una escenografía muy sencilla pero terriblemente efectiva (de nuevo la versatilidad del Nacional – en este caso la Sala Petita – funciona perfectamente), la música en directo de Dani Nel·lo y Jordi Soto (una deliciosa partitura con regusto a Tom Waits que interpreta en directo un cuarteto dirigido por el ex saxofonista de Los Rebeldes), el ritmo (la obra dura dos horas pero no decae en ningún momento), el maquillaje...
No es una obra para todos los públicos – pese a mis elogios el texto sigue siendo difícil, brillante pero difícil- pero creo que gustará a los que soléis ir al teatro. A nosotros nos gustó... y mucho.

1 comentario:

Sin Paliativos dijo...

Buena recomendación,está bien

Dani Nel.lo, bufff que tiempos, Los Rebeldes...

Saludos